Reconoce las caras

Así es como actúa tu cerebro cuando reconoce caras

El trabajo de un equipo de científicos del MIT ha sentado algunas claves sobre cómo el cerebro reconoce las caras.

Reconocer una cara es de los actos más habituales del día a día. Desde que te levantas ves rostros conocidos. Saludas al portero de tu edificio porque lo conoces de otras veces, cuando llegas al trabajo lo mismo ocurre con tus compañeros y, si te encuentras a alguien por la calle, te paras porque reconoces su cara. Es uno de esos procesos automatizados a los que no damos importancia. Pero, ¿cómo se produce esta identificación? No es una tarea fácil.

Pensemos en lo sencillo que es olvidar una cara. Como para los nombres, para las caras hay gente que tiene buena memoria y otros no tanta. No acordarse de alguien es relativamente sencillo y en esto el aspecto que más inclina la balanza a un lado o a otro es el rostro. La complexión, el tono de voz e incluso la ropa son algunos factores que pueden facilitar el reconocimiento, pero sin duda, lo más representativo de una persona es ese cartel identificador que va desde la barbilla al final de la frente.

Y como muchos de los procesos que lleva a cabo el cerebro, su forma en que reconoce las caras es un misterio. Sin embargo, un equipo de científicos del MIT ha arrojado algo de luz sobre este aspecto. Sin hacer determinaciones tajantes, Tomaso Poggio, uno de los principales investigadores del MIT en lo que al cerebro se refiere, ha señalado que la investigación va en el buen camino para descubrir cómo el cerebro reconoce las caras.

Los científicos han desarrollado un sistema de aprendizaje automático, una rama de la inteligencia artificial orientada a que los algoritmos puedan aprender por sí solos. Para entrenar al sistema a reconocer caras se les introdujo una serie de imágenes de muestra. Pero pronto descubrieron que el software ejecutaba un paso intermedio de procesamiento, en el que representaba el grado de rotación del rostro. Esta capacidad no se desarrolló aposta en el sistema, sino que fue este mismo el que la creó espontáneamente a partir del proceso de entrenamiento, como dando respuesta a una necesidad.

Los científicos creen que el funcionamiento de este sistema y el del cerebro comparten el mecanismo, porque en experimentos con primates se observó este paseo intermedio. Los científicos creen que el cerebro genera representaciones invariables de caras y otros objetos. De esta manera puede reconocer estos objetos independientemente de cómo los vea (su orientación en el espacio, la distancia a la que están o su entorno).

Reconoce las caras

Pero esta representación invariable no es un modelo en sí. En el sistema de inteligencia artificial las unidades de procesamiento se organizan en capas. Se ha buscado que el despliegue se parezca al que hace el cerebro. La información primero llega a la primera capa de procesamiento, que es capaz de reconocer la cara aún si está rotada 45 grados a la izquierda, la siguiente capa aunque esté rotada 45 grados a la derecha. Así se va accediendo a capas hasta que se identifica el rostro.

Los primates podrían procesar los rostros de una forma similar. Pues en el caso de estos animales, sus nervios ópticos envían una señal a través de una serie de localizaciones del cerebro. La sensibilidad de cada una de ellas hacia la orientación de las caras aumenta a medida que la información se acerca a la región final.

Imágenes: tjdewey y kscottz

Sobre el autor

RELACIONADOS

GPTs Custom

Cómo hacer GPTs Custom

Hace unos meses, OpenAI presentó una nueva función para ChatGPT, el popular chatbot de la compañía que funciona gracias a GPT-4, su modelo de...