La experiencia de pagar mediante la identificación de las venas de la palma de la mano

Hemos podido realizar una compra con PalmSecure, un sistema biométrico que analiza las venas de la palma de nuestra mano para identificación.

En los últimos años las variables biométricas han cambiado todo en cuanto a seguridad. Algo que antes sólo estaba reservado a cuerpos y fuerzas de seguridad de los estados, ahora está disponible para cualquier ciudadano que tenga un smartphone u ordenador compatible. Además de aportar nueva seguridad, hace que el usuario, sobre todo, se preocupe por ella. Sin métodos rápidos y sencillos tendemos a despreciarla. Queremos seguridad, pero sólo si no supone una pérdida de tiempo diaria a la hora de alcanzar nuestro objetivo. Los sensores de huellas dactilares han ayudado con ello, y ahora es el turno de otros.

Hemos podido probar PalmSecure, de Fujitsu, un sistema de reconocimiento biométrico que analiza el patrón de venas de nuestra mano. Gracias a un sensor de luz infrarroja, el sistema es capaz de identificar la forma y la estructura, y dada la densidad de información existente , el sistema es mucho más seguro que el de huella dactilar, que se ha probado hackeable incluso con fotografías de alta resolución.

Palmsecure 2

La primera vez que guardamos nuestra huella dactilar el proceso es relativamente largo, y el usuario tiene que levantar y bajar el dedo muchas veces. Con el sistema de registro que hemos probado, con una simple lectura en segundos la información de la palma de nuestra mano queda guardada para siempre. La parte del reconocimiento, que probamos comprando con tarjeta en una máquina expendodora, no es más rápida que el lector de nuestro móvil, pero no porque sea lenta, sino porque los lectores actuales de smartphones han eliminado toda la fricción existente y son instantáneos. Probamos unas diez veces sobre el lector, y en todas ellas funcionó a la perfección y con buena velocidad.

Obviamente, para que el sistema funcione, la mano tiene que tener vida y riego sanguíneo, o de lo contrario el sistema no detectará nada y dará error. Por otra parte, aunque el lector que nosotros hemos probado tiene un tamaño considerable, se trata de una solución que Fujitsu ya ha implementado en portátiles con un tamaño muy reducido.Otros lugares donde está comenzando a probarse es en centros médicos y en cajeros de bancos, donde en vez de PIN se solicita la colocación de la mano en el momento de extraer dinero.

Imágenes: Antonio Sabán.

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