El auge de los ‘wearables’ llega al ecosistema emprendedor

De ser una tendencia y un futurible han pasado a ser un incipiente negocio. En España ya hay startups y emprendedores ofreciendo sus productos y servicios en torno a los wearables, un emergente segmento de mercado que se perfila como una fuente de infinitas posibilidades.

Quién iba a imaginarse hace unos años que surgiría un dispositivo que aspiraría a destronar al smartphone como gadget favorito. El caso es que los wearables, que se iniciaron tímidamente sobre todo como dispositivos vinculados al mundo del deporte, se están perfilando como la nueva revelación tecnológica, como un gadget disruptivo. El mercado, o al menos los analistas, parecen entusiasmados: según previsiones de IDC, este año se enviarán 45,7 millones de unidades y 126,1 millones de unidades en 2019. El auge de los wearables o llevables o vestibles (como se viene traduciendo en castellano) se perfila como imparable. Sobre todo después de que Apple haya lanzando su Watch, el reloj inteligente del que se espera que se convierta en el dinamizador del mercado, papel se han adjudicado los de Cupertino desde que lanzaron el iPod, pasando por el iPhone y llegando al iPad.

«En wearables, creo que todavía estamos en las etapas iniciales y hay todavía muchas cosas que tenemos que averiguar acerca de ellos y es una categoría amplia, no sólo están los smartwatch y los de muñeca, que parecen los orientados a producción masiva destinada al público general. Pensando en las tendencias de futuro, creo que girará alrededor de la muñeca, tomando diferentes formas. Aún no hay consenso en cuanto a qué aspecto tendrá y cómo interactuará el wearable de muñeca prototípico. Ahora tenemos wearables de fitness pero también empezaremos a ver vestibles de muñeca que no solo hacen un seguimiento de tu actividad sino que también permiten hacer otras cosas, y eso sería el enfoque de ‘navaja suiza», comenta David Hindman, Interaction Design Director de Fjord en San Francisco, consultora de diseño de servicios y el brazo de diseño e innovación de Accenture Interactive, que cuenta con gran experiencia en el diseño para wearables con proyectos tan destacados como el prototipo desarrollado con Philips y Emotiv para enfermos de ELA, el interfaz del reloj Adidas miCoach o una serie de apps para la startup Fitbug compuesta por planes interactivos personalizados para distintos propósitos (perder peso, recuperarse del embarazo, correr más rápido…).

wearables

La clave de este boom pasa por la interconexión con otros dispositivos, ahora mismo con el smartphone pero en breve ya no sólo con él. Los llevables o como los acabemos llamando en castellano son uno de los verticales de Internet de las cosas (Internet of Things o IoT). Así de claro lo tiene Marc Pous, CEO e Internet of Things Advocate de thethings.iO, una startup orientada a ayudar con su plataforma en la nube a otras empresas que hacen wearables y dispositivos conectados. Pous invita a reflexionar sobre las previsiones de mercado de dispositivos conectados (no solo wearables) para 2020 que serán aproximadamente 25.000 millones de unidades. «Si lo comparamos con la previsión de dispositivos móviles que se conectarán en 2020, que será de 7.000 millones, ¿puedes visualizar los modelos de negocios que se puede generar de una tecnología casi cuatro veces más grande que la de los móviles?».

Pues muchos emprendedores y startups ya lo han hecho y han empezado a desarrollar sus proyectos, productos y servicios. Aunque gran parte de ellas surgen en Estados Unidos, casi siempre vinculadas a plataformas de crowdfunding como método para financiar su desarrollo y lanzamiento. Ese fue el emblemático caso del smartwatch Pebble. Pero si algo hemos aprendido de la deslocalización en todos estos años es que la liebre puede saltar en cualquier lugar del mundo.

Proyectos españoles

En España han surgido y están apareciendo proyectos que se están posicionando como pioneros en un mercado incipiente que no hará más que evolucionar y que contempla diferentes ámbitos, desde los propios dispositivos hasta los servicios, las apps, el software, el firmware y el hardware.

Creada por tres emprendedores, la empresa asturiana Wetech fabrica wearables cuyo elemento diferenciador es la estética, su diseño y sus materiales. Se alejan del enfoque habitual más futurista y tecnológica para alinearse con las tendencias de diseño de moda. «Por la importancia de la estética y porque tradicionalmente los accesorios de moda han sido pensados principalmente para un público femenino, Wetech inicialmente se centra en este segmento. Sin embargo, hemos aprendido que no debemos descuidar a los chicos, ellos son los principales consumidores de tecnología wearable», explica Amelia Suárez García, cofundadora de Wetech y Directora de I+D.

pulseras wearable

La gama de productos que comercializan usa tecnología NFC para iniciar funciones desde el wearable en el propio móvil del usuario. «A partir de este producto estamos trabajando para integrar una nueva funcionalidad, basada también en interacción contactless, como son la apertura de puertas y control de accesos a zonas comunes, el control de accesos en conciertos o eventos, por mencionar algunos ejemplos», indica.

Y es que, con la eclosión en paralelo del Internet de las Cosas, están surgiendo numerosos dispositivos conectados en casi cualquier estancia o ámbito de la vida, desde la cocina, al salón, el coche, la oficina o la ciudad (smart city)… Para facilitar un parte del trabajo a quienes quieran desarrollar productos en este campo thethings.iO ofrece su servicio de backend en la nube. «Actualmente todas las empresas que conectan dispositivos a Internet hacen todo de cero y esto es muy costoso. Nosotros les permitimos focalizarse en su producto y con nuestra tecnología conectamos sus dispositivos a Internet en tiempo real. Además de acelerar su desarrollo, nuestra tecnología les permite ahorrar dinero. Tenemos un sistema de pricing que les permite pagar solo si venden dispositivos», explica Marc Pous, CEO de thethings.iO, startup que aspira a convertirse en el Amazon Web Services para el Internet of Things.

Y enfocados también a crear la tecnología necesaria, en este caso hardware y firmware, para ayudar a terceros en sus desarrollos e implementaciones de productos y proyectos enfocados en el Internet de las cosas está Zolertia, una startup que surgió en el seno de una empresa de ingeniería de telecomunicaciones y que ha participado en el proceso de aceleración del Startupbootcamp IoT & Data que recientemente tuvo lugar en Barcelona. Desarrolla hardware para el Internet of Things utilizado por ingenieros, empresas, pequeños negocios, makers, universitarios, centros de investigación y desarrollo, hobbystas y emprendedores para crear productos conectados a Internet. Su último lanzamiento, Re-Mote es un dispositivo IoT de comunicación para productos y proyectos industriales, agricultura, energía, minería, smart cities, healthcare, transporte y logística. Está actualmente disponible para reserva en su web y en los próximos meses estará disponible en la plataforma de crowdfunding Indiegogo. «Lo que más nos demandan los emprendedores es que consigamos llevar su idea a un producto física lo más rápido posible e iterando el máximo de veces posible, de esta manera ellos pueden testear con el mercado su producto fácilmente. Estamos enfocados en soluciones B2B para smart cities, agricultura, energía o seguridad, entre otras, porque son áreas en las que hemos visto que existen muchas necesidades comunes y que el Internet of Things puede cubrir y aportar gran valor a través de wearables», comenta Albert Manjon, CCO de Zolertia.

zolerita wearablesAunque la muñeca se perfila como la principal ubicación del wearable, quizás por comodidad, no va a ser la única ni mucho menos. Los tejidos conectados, de los que siempre se ha hablado como tendencia futurible, son una realidad que ya cuenta con emprendedores desarrollando productos concretos e incluso con perspectivas comerciales. Es el caso de First V1sion, una startup que ha lanzado un wearable textil que integra una cámara de vídeo y se orienta a la retransmisión de eventos deportivos.
«Queremos estar en la piel de nuestros deportistas, vivir y sentir lo que ellos sienten y viven, y todo en tiempo real. Aportamos la visión subjetiva o punto de vista del deportista y también información adicional a través de sensores biométricos sobre el estado del deportista. Con ello además de generar mayor espectáculo es posible prevenir lesiones o hechos desgraciados como muertes súbitas», explica David Abajo, responsable comercial de First V1sion. La versión actual de su producto lleva instalados un pulsómetro y un acelerómetro, pero la idea es incorporar otro tipo de sensores e incluso un micro… «Aunque estamos centrados en las retransmisiones deportivas también se podría usar en shows televisivos». Firt V1sion ya está en el mercado y con ella acaban de cubrir la Final Four de Basketball en Madrid. La startup cuenta con socios como Andrés Iniesta y Serge Ibaka y ahora mismo están inmersos en una ronda de crowdfunding público a través de su web.

Posibilidades infinitas

Estos son algunos ejemplos de negocios que se han iniciado en España en torno a esta revolución que supondrán los wearables y que quizás aún no se alcanza a vislumbrar como negocio. «Los wearables ofrecen posibilidades infinitas, esta es la potencia del Internet of Things, que se puede aplicar innovación ilimitada», remarca el CEO de thethings.iO.

Actualmente se usan acelerómetros, sensores de temperatura, de humedad, sensores de ritmo cardiaco y de saturación de oxígeno en sangre… «La sensórica se integra con el fin de medir los parámetros relevantes a la función buscada, en estos casos en las áreas de salud y deporte. Hay otro tipo de sensórica relativa a biometría que también abre la puerta a aplicaciones muy interesantes en seguridad», comenta la cofundadora y directora de I+D de Wetech.

Y es que la otra gran tendencia tecnológica que se está extendiendo al gran público gracias a su inclusión es los smartphones es la biometría y que aportará nuevas capacidades a los wearables. «Actualmente contamos con información sobre las constantes vitales, el movimiento, el sonido pero creo que en un futuro próximo podremos comenzar a utilizar inputs que permitan que estos dispositivos sean más inteligentes y tal vez que nuestras interacciones con ellos sean más simple. Por ejemplo, ya hay una aplicación -no un wearable- a la que se puede acceder mediante el reconocimiento de la cara. En el futuro podremos hacer esto mediante el reconocimiento de la constitución biológica de cada uno. Actualmente contamos con una tecnología muy precisa que lee emociones faciales«, comenta David Hindman, Interaction Design Director de Fjord en San Francisco. «Vamos a ver más aplicaciones de estas tecnologías de biolectura y reconocimiento facial y emocional. Tendremos dispositivos -potencialmente wearables- que reconocerán nuestro estado de ánimo y responderán en consecuencia. Este tipo de sensores que permiten que el dispositivo se anticipe nuestros deseos y necesidades van a ser realmente interesante».

biometria wearables

Pero el potencial de negocio de los wearables pasa también por la interacción con otros campos la geolocalización. «Además de los datos los sensores facilitan patrones de comportamiento que pueden resultar muy interesantes para las marcas desde un punto de vista publicitario”, apunta David Abajo, responsable comercial de First V1sion.

Oportunidades de negocio

Y ¿dónde se centran las oportunidades de negocio? Para Hindman hay tres caminos en los que los emprendedores pueden explorar. Por un lado llevar servicios existentes en otras plataformas a los wearables, facilitando su uso. Por otro lado, desarrollando servicios nativos para wearables, que solo estén disponibles en la muñeca. «Creo que habrá nuevas formas de comunicación que surgen de los componentes hápticos. Un código morse moderno en lugar de escribir en una pantalla». Y la tercera vía que comenta David Hindmand son los juegos: «La oportunidad para el entretenimiento va a ser muy interesante: juegos táctiles, juegos de pantalla pequeños…».

Pero si tenemos presente que los wearables son solo un vertical del Internet of Things, el campo se amplía infinitamente, solo hay que imaginarse un wearable capaz de interactuar con otros dispositivos físicos. «Lo importante es hacer un producto que ofrezca un valor o una necesidad que no se puede cubrir sin un wearable», apunta Marc Pous. Además como nueva tecnología, estos dispositivos permitirán crear oportunidades a lo largo de toda la cadena de valor: desde diseñadores industriales, diseñadores de hardware y firmware, desarrolladores de software, distribución, etc. «Sin contar los nuevos modelos de negocio que resultarán de la cantidad de información que estaremos transmitiendo en todo momento», comenta el CCO de Zolertia.

wearables iot

De momento la mayoría de las tecnologías wearable se han lanzado como productos para el gran consumo y hay pocos casos que se hayan utilizado como servicio vinculado a una empresa. «Es desde luego un campo de enorme interés con mucho por explotar. En Wetech estamos hablando con empresas en dos sectores específicos, con el fin de ofrecer a sus clientes experiencias de uso diferentes en la forma en que realizan operaciones cotidianas», asegura Amelia Suárez.

Ecosistema fracturado

Para el Interaction Design Director de Fjord, el mayor desafío ahora mismo en este segmento de mercado es que los ecosistemas están fracturados y hay gran cantidad de dispositivos diferentes. «Aún no se ha convergido en una visión unificada sobre lo que el mercado quiere de cada uno de estos tipos de dispositivos. También muchos todavía están atados al teléfono». Para Hindman el mayor desafío de los emprendedores «es elegir el dispositivo para crear, y si no hay uno por ahí que se adapte a sus objetivos, entonces deciden crear su propio, y eso sería otro reto». Él recomienda centrarse en un solo tipo de dispositivo wearable y no desarrollar una app que funcione en varios, porque en el mundo de los wearables aún no existe el concepto de multiplataforma.»Con los dispositivos móviles, puedes desarrollar una app que –con pequeños cambios- funcionará igual en Android, iOS, en un móvil, una tableta… pero una app para un dispositivo de muñeca no va a ser válida para otro tipo de wearables que se llevan en otras partes del cuerpo (gafas, camisetas con sensores…)».

Sin embargo ahora mismo el principal reto en este sector es ganar cuota de mercado. «La tecnología wearable es una novedad disruptiva y como tal tiene una buena repercusión mediática, despierta la curiosidad y el interés de un segmento importante de la población, interesado en avances tecnológicos, pero son aún pocos los que se deciden a probar este tipo de productos», incide la cofundadora de Wetech. Quizás tal y como vaticinan analistas y consultores el Apple Watch ayude a popularizar estos dispositivos como ya hizo anteriormente con otros. De hecho la previsión de ventas del Apple Watch impacta enormemente en las estimaciones del tamaño total del mercado global de wearables. Quizás el precio y la escasa disponibilidad del smartwatch de Apple no dinamice tanto como cabe esperar.

Imágenes vía |Shutterstock, Wetech y Zolerita

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