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Tecnología 5G: el coche sin conductor es una realidad

Desde que fue anunciado el lanzamiento de la tecnología 5G, el mundo empresarial comenzó a estudiar todas sus posibles aplicaciones y beneficios. Lo que no se esperaba es la profundidad con la que esta tecnología haría impacto en el mundo industrial. Esto propició el momento perfecto para hacer realidad un sueño postergado: el coche sin conductor.

Tecnología 5G y el desafío de un coche sin conductor

Aunque ya existen vehículos inteligentes y eléctricos que pueden mantener una conectividad web y tienen características smart (Inteligentes), los coches 5G llevan todo esto mucho más allá. A grandes rasgos, se está hablando de automóviles que puedan conducirse por sí solos.

El eje principal de estos vehículos es su capacidad de aprendizaje constante. Cuanto más tiempo conduzca, mejor será su desempeño. El empleo de una conectividad de alta velocidad le permite identificar cientos de patrones, que con otras tecnologías no podrían lograrse. La conectividad 5G hoy permite una transmisión de datos crucial para el desarrollo de un coche sin conductor.

Un coche autónomo precisa recibir y transmitir información de todo su entorno en tiempo real. Esta nueva generación de coches automóviles, pueden percibir los semáforos, peatones, automóviles y todo tipo de obstáculos que puedan presentarse. La transferencia de datos en tiempo real solo es posible gracias a la nueva tecnología 5G.

Un punto muy importante es lo esencial que es esta tecnología para la seguridad vial. La transferencia de datos que puede proporcionar la tecnología 5G, puede servir no solo para vehículos sin conductor. Sino que también puede reducir la gran cantidad de accidentes que se presentan en las carreteras de todo el mundo.

Características esenciales

En cuanto al coche sin conductor, es necesario entender que sin la transferencia de datos de alta velocidad no podrían llevarse adelante algunas de las siguientes especificaciones.

1. Capacidad de conexión: El vehículo estará conectado a una gran cantidad de dispositivos, en rangos relativamente pequeños. Por esta razón, debe poder soportar la conexión de todos estos dispositivos simultáneamente.

2. Baja latencia: La latencia es el retraso en la conectividad y transmisión de datos. Este punto es muy importante, ya que a menor latencia, mejor será el desempeño del automóvil a posibles riesgos.

3. Seguridad de datos: El sistema de seguridad cibernética tiene que ser sumamente confiable. Esto, para evitar cualquier tipo de ataque externo. La transmisión de datos es vital para estos vehículos, por lo que la seguridad es un punto fundamental.

4. Estabilidad de conexión: El coche sin conductor debe mantener una conectividad estable, sin sobresaltos ni cortes prolongados. La falta de esta estabilidad, presentaría un gran problema a la hora de ejecutar su autonomía.

La actualidad del 5G

Gracias al apoyo de la Asociación Automotriz 5G (5GAA), el desarrollo de esta tecnología llegó a su punto más alto. Pero por otro lado, esta misma asociación ha dejado en claro que sin el desarrollo 5G, la consolidación del coche sin conductor no podrá llevarse adelante.

La industria es consciente de la necesidad de una red de alta velocidad. Esto, si se quiere establecer la próxima generación de vehículos autónomos. Actualmente, los países se han puesto en marcha para incorporar estos avances y lentamente se están abriendo a esta tecnología.

Sin ir más lejos, el departamento de transporte del Reino Unido ha anunciado que posiblemente pueda verse un coche sin conductor en el transcurso del 2021. El sistema utilizado en este caso en particular se denomina ALKS (Sistema automatizado de conservación de carril).

Sin embargo, el empleo de esta tecnología aún tiene algunos desafíos por delante. La infraestructura de las carreteras aún no ha madurado lo suficiente. Pero el optimismo está en lo alto, los gobiernos ya han visto que el momento del cambio es ahora. No es momento de quedarse atrás.

Si bien muchos expertos aseguran que en el 2021 no se podrán llevar adelante estas ideas, en muchos países ya están trabajando en ello. Es una realidad la existencia del coche que se conduce solo.  La tecnología ya apareció, las grandes industrias automotrices ya están invirtiendo en estas ideas y el momento es ahora.

Imágen de cabecera: Julien Tromeur

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