Los sensores flexibles textiles dan más posibilidades a la ropa del futuro

Ya existe ropa inteligente, pero aún hay mucho camino hasta hacerla no sólo invisible, sino tan duradera y resistente como la normal. Los sensores flexibles textiles de LG apuntan en esa dirección.

La ropa conectada, inteligente o electrónica empieza a dejar de ser una novedad, aunque, eso sí, aún falte mucho para que se convierta en algo que vemos con normalidad y que por coste se puede integrar en el día a día. En España existen algunos de los mejores ejemplos de cómo esta ropa puede ayudar en deporte y en otras actividades, pero, como en el precio, la tecnología aún precisa de algunos avances. LG ha desarrollado sensores flexibles para textiles que pueden ser muy relevantes en el futuro del sector.

De momento no pasan de la etapa de sensores aislados de muestra, pero ya detectan presión a lo largo de todo el tejido y no sólo en un punto específico. Este detalle puede beneficiar a industrias como la manufacturera o la médica, según la compañía surcoreana, ya que, además, hasta ahora, este tipo de sensores sólo eran posibles en medios rígidos. Ahora, gracias al empleo del poliuretano, flexible y elástico, se puede integrar en otros productos sin excesivos problemas.

Además de ser flexible, tiene que ser, como todo lo que se emplea y se lleva puesto en el día a día, duradero y compatible con todas las condiciones. Según LG, están preparados para soportar desde -40º centígrados hasta 80º centígrados durante más de 240 horas cada vez, además de soportar ser aplastados por 70 kilogramos hasta 100.000 veces.Sobre usos concretos, los sensores pueden ser empleados para múltiples elementos de vestir, desde zapatillas hasta chaquetas o camisetas deportivas. En todas ellas la primera aplicación es simple.

Iofit

Detectar movimientos corporales o del pie que indiquen cómo pisamos o realizamos un movimiento determinado que puede ser dañino o simplemente precisar de ser mejorado para la práctica de ciertos deportes. Soluciones similares a esto se han visto en zapatillas como IoFIT, que no sólo analizan la pisada, sino que, con la ayuda de una cámara, son capaces de aconsejar sobre posturas adoptadas para golpeos en golf o tenis.

Aquí es lo mismo, pero dada la versatilidad del material se puede llevar también a asientos de coches y otros vehículos. Pueden aconsejar a pilotos, pero también a particulares sobre, por ejemplo, que la postura que están adoptando en un momento determinado no es correcta para la columna vertebral.

Imagen: LG Innotek.

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