Uno de los retos que los bancos tienen por delante en esta era de la digitalización está relacionado con las expectativas de los clientes. El mundo digital ha puesto el listón alto entre los usuarios en cuanto a inmediatez, comodidad, adaptabilidad, personalización. Son cualidades no siempre fáciles de ofrecer para compañías que llevan décadas operando, a veces más de cien años, y que cuentan con un enorme legacy tecnológico a sus espaldas. Sin embargo, con el 5G la oficina bancaria lo tendrá más fácil para lograr algunos de estos beneficios.
La conectividad no deja de ser la piedra angular para proporcionar una experiencia online satisfactoria a los clientes. Y la fiabilidad del 5G contribuye a que la conexión no sea un impedimento sino todo lo contrario. La mayor velocidad de la nueva tecnología permitirá el despliegue fluido de servicios y productos a los usuarios finales. La latencia mejorará la experiencia del cliente. Y será posible establecer una oficina bancaria provisional en cualquier punto, gracias a que el 5G proporciona una conexión similar al cable de fibra.
Ventajas del 5G para la banca
La mejora más conocida del 5G es su salto en velocidad respecto al 4G. Para las instituciones financieras esto significará que podrán realizar operaciones complejas mucho más rápido. Si un consumidor quiere comprar un coche o cualquier producto caro, la solicitud de un crédito y su aprobación será más fluida. Lo mismo ocurrirá con las transferencias de dinero y las inversiones de trading, que serán más fluidas.
Si la pandemia ha puesto de manifiesto la imperiosa necesidad de que los bancos sean empresas digitales, el 5G será un aliado en este proceso. Permitirá crear aplicaciones bancarias más eficientes, así como usar de forma más eficaz la información almacenada en la nube.
La capacidad que tiene el 5G de soportar un enorme número de dispositivos conectados al mismo tiempo también supone una ventaja. Esta cualidad incentivará la expansión de Internet de las cosas, de donde se pueden obtener datos para enriquecer los servicios financieros.
Adopción de nuevas tecnologías gracias al 5G
Las entidades bancarias podrán ser más creativas a la hora de desarrollar aplicaciones móviles o páginas web. Y es que contando con el 5G se podrán usar más recursos, como streaming de vídeo en tiempo real o realidad aumentada. Con esta última tecnología se podría personalizar la interacción con los clientes o enriquecer los asistentes virtuales. Si a esto se le suma el acceso a la inteligencia artificial que descansa en los servidores de la compañía se podrían resolver consultas complejas.
Ni que decir tiene que el uso de videollamadas desde el móvil será posible sin interrupciones. De forma que la comunicación con la oficina bancaria o el centro de llamadas del banco será más sencilla. Todo con el fin de mejorar la experiencia del cliente final.
Y en este sentido también irá el análisis de datos. Gracias al 5G se podrán subir a la nube más datos, procesarlos y devolver una respuesta en tiempo real. Incluso cuando se trate de grandes volúmenes de información. Los bancos podrán recoger más datos sobre las rutinas diarias de los usuarios para generar una experiencia mejor. De la misma forma, se podrá integrar información de trading procedente de distintas fuentes para ofrecer a los inversores, con el fin de que tomen decisiones más informadas.
Información en tiempo real
La inmediatez en la que vivimos demanda cada vez con más ahínco información en tiempo real. El 5G, por sus características, es una tecnología capaz de entregar datos de esta manera. Parte de esta conectividad es el edge computing, que permite hacer el procesamiento cerca del usuario final, en un servidor que pertenece a la red. De esta forma se evita el envío de los paquetes de información a los centros de datos y a los núcleos de la red para su procesamiento, con el consiguiente viaje de vuelta para entregar la respuesta.
El edge computing acelerará todos los procesos actuales y permitirá otros más pesados. Entre otras cosas podría aumentar la seguridad de las aplicaciones bancarias. Estas podrían utilizar biometría, que es una tecnología que necesita una capacidad de cómputo abundante para desplegar una funcionalidad fluida. Además, la prevención del fraude de las entidades mejorará, pues la afluencia de datos será mayor y más rápida. De esta forma, cualquier transacción que no encaje con los patrones habituales podrá marcarse con celeridad e investigarse, antes de que sea demasiado tarde.
La oficina bancaria 5G
Una de las ambiciones derivadas del 5G es reconvertir la oficina bancaria para expandir sus servicios y mejorar la experiencia. Un piloto de Telefónica con Banco Santander, desplegado en Alcobendas en colaboración con el proveedor de red ZTE, ha probado la nueva conectividad en este contexto del sector financiero.
La red 5G se desplegó, tanto en la parte radio como en el núcleo y los terminales, en modo 5G SA o standalone. Es decir, sin mediación de la infraestructura 4G. A partir de ahí se contemplan tres casos de uso. El primero es la adopción de videoconferencias 4K entre dos oficinas bancarias. De esta forma, se consigue una resolución ultra HD y un movimiento natural, gracias a sus 30 frames por segundo. Evidentemente, con la mínima latencia del 5G no existe retardo ni congelaciones de imagen.
Otra de las aplicaciones del piloto es una solución de almacenamiento en la nube con baja latencia. En este caso se implica también el proveedor Hitachi y el resultado es el acceso ágil a los datos. Mientras que el tercer caso de uso es la visita virtual a espacios de coworking de la entidad bancaria, como el Santander Work Café, en la calle Velázquez de Madrid. Para ello se utiliza tecnología de realidad virtual, vídeo 360 y Edge computing y se ha contado con la empresa especializada Idronia.
Esta experiencia abre la puerta a una oficina bancaria 5G en movilidad y con altas prestaciones. No se necesita ya disponer de un lugar físico fijo, cableado. Puede ser una oficina temporal, que se monte para un determinado evento o únicamente durante un periodo. Sin embargo, el 5G la convierte en un entorno plenamente funcional. Más aún, mejora sus capacidades respecto a las sucursales actuales.
