La tecnología LED del sistema de iluminación de la superficie del edificio hará que las formas de la Tower Infinity se difuminen en el entorno, creando una capa de semiinvisibilidad.
Hasta ahora la carrera mediática de muchas ciudades sólo era una cuestión de altura con el fin de liderar el exclusivo ránking de los edificios más altos del planeta. Pero ya no basta con ganarle unos metros de altura al récord mundial vigente. Otros factores como la aplicación de criterios de sostenibilidad y ecoeficiencia o el uso de tecnología punta en la gestión y funcionamiento del edificio, empiezan a cobrar mayor importancia. Es el caso de la nueva variable introducida por el gobierno de Corea del Sur para la nueva torre de la ciudad, autorizando la construcción de lo que será el primer rascacielos invisible del mundo.
La Tower Infinity, diseñada por el estudio estadounidense GDS Architects, junto con la colaboración del Samoo Architects y A&U, contará con una estructura de 450 metros de altura, totalmente cubierta de vidrio translúcido y un sofisticado sistema tecnológico de camuflaje basado en cámaras y proyectores LED, capaz de mimetizarse con el entorno y ocultar su estructura a la vista del espectador.
Este peculiar edificio, que estará situado en el Distrito de Negocios Yongsan Internacional, cerca del Aeropuerto Internacional de Icheon, ya cuenta con el visto bueno de las autoridades de Corea del Sur y de la dirección del Aeropuerto Internacional, por lo que ya se han otorgado los permisos construcción del que será el sexto rascacielos más alto del planeta.
¿Cómo se desmaterializará el edificio? En principio, el proceso de invisibilidad de la estructura del edificio se basa en un efecto óptico y visual de mimesis de la envolvente del edificio con su entorno. Para ello la envolvente del rascacielos estará provista de un sistema de cámaras y pantallas LED de última generación que capturarán todo lo que ocurra en un lado del edificio para proyectar esa imagen en el lado contrario. Con esta tecnología de captura y proyección del entorno en tiempo real se conseguirá el efecto óptico de la invisibilidad de la estructura, al camuflarse con su entorno.
Obviamente, la inmaterialidad de la imponente estructura el edificio no será de manera completa. Según GDS, la tecnología LED del sistema de iluminación de la superficie del edificio hará que las formas de la Tower Infinity se difuminen en el entorno, creando una capa de semiinvisibilidad.
Para crear la ilusión óptica de la inmaterialidad, las imágenes captadas por las cámaras se someterán en tiempo real a un proceso de ajuste, rotación y compilación para crear una imagen panorámica a gran escala del entorno. Cada imagen panorámica correspondiente a cada uno de los lados de la fachada aparecerá proyectada en las filas de pantallas LED de la fachada opuesta para crear la ilusión óptica de lo que promete ser el primer rascacielos invisible del mundo.
El proyecto del rascacielos Tower Infinity lleva en marcha ya dos años, tras ganar el primer premio del concurso nacional de ideas, patrocinado por Korea Land Housing –LH– en 2011. Se prevé que la construcción de la Torre de Observación, dispuesta a convertirse en la nueva imagen de Seúl, finalice a finales del año 2014.
Imágenes | vía archinect
