Dentro de la nueva ola de controladores inalámbricos llega desde Thalmic Labs un nuevo dispositivo con un nuevo concepto, que aunque va en la misma vía de Leap Motion, poco tiene que ver. Como se trató en otro post sobre interfaces en este mismo blog, parece que la interfaz hombre-máquina está destinada a cambiar.
MYO es un brazalete que hay que colocar en el antebrazo y que basa su tecnología en la detección de 2 parámetros. El primer parámetro es la actividad muscular del antebrazo. Dado que los músculos del antebrazo llegan hasta la mano, los movimientos de los dedos también son detectados. El segundo parámetro es la detección del movimiento.
El dispositivo está en fase de pre-venta/financiación, proceso al que también acudió Leap Motion, y no estará disponible hasta inicios de 2014.
En Thalmic afirman que el sistema comienza a detectar los primeros desplazamientos musculares, incluso antes de que el movimiento sea completo, por lo que la respuesta es inmediata. Y en cuanto al movimiento, no sólo se limita al desplazamiento sino también a rotaciones.
El hardware está compuesto por unos sensores de actividad muscular y 6 detectores de movimiento que están controlados por un procesador ARM (como el que equipan muchos dispositivos Android actualmente), conectados mediante Bluetooth 4.0 de bajo consumo de energía, alimentados todos ellos por una batería de ión de litio recargable.
Un ligero inconveniente para el usuario final no experto es la necesidad de configuración de cada uno de los movimientos, pero para desarrolladores abre un abanico de posibilidades al no estar predeterminadas las respuestas como en el caso de un mouse.
Otra de las disyuntivas que plantea el caso es qué ocurre cuando se agota la batería, ya que no se puede reemplazar por otra que esté cargada. Es un problema que otros dispositivos no presentan.
¿Nos dirigimos hacia un futuro donde interactuaremos visualmente desde una lente de realidad aumentada, unas zapatillas ‘inteligentes’, un reloj multifuncional, el Smartphone en el bolsillo, y todo controlado por un dispositivo ubicado en el brazo?
Parece el guión de la próxima película de ciencia ficción, o el argumento para un bestseller del mismo género.
Sólo el tiempo lo dirá.
Imagen: Cult of Mac