Científicos de la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Málaga desarrollan un prototipo que nos ayuda a identificar qué le pasa al coche averiado.
Se trata de una de los fastidios más habituales. En pleno fin de semana, de camino al trabajo o cuando vamos más apurados, es posible que nos hayamos encontrado con el clásico problema del coche averiado. La solución más habitual es llamar a la grúa y llevarlo al taller para que lo arreglen, pero ahora las matemáticas pueden ayudarnos a identificar el fallo.
Queridas y odiadas a partes iguales, la asignatura que nos marcó a todos en nuestra etapa escolar regresa a nuestras vidas para echarnos un cable en los momentos más inoportunos. Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid han participado en el desarrollo de un prototipo que, traduciendo la avería a fórmulas algebraicas y razonando sobre ellas, es capaz de ayudarnos a conocer qué le pasa a nuestro coche averiado.
Pautas para identificar la avería
Y es que muchas veces nos sentimos «indefensos» cuando vemos que se enciende un piloto luminoso en el panel del vehículo. El prototipo, diseñado en forma de aplicación para smartphones o tablets, funciona como un «traductor» para el conductor no experto. Los científicos de la Complutense, en colaboración con la Universidad de Málaga, pusieron en marcha este proyecto precisamente por una experiencia personal cercana. Un familiar de uno de los investigadores vio que se iluminaba un testigo luminoso en su coche averiado, que resultó corresponder a la señal de la presión de aceite.
Como no supo qué hacer, decidió conducir hasta la gasolinera más próxima para pedir ayuda. El problema es que esta elección causó daños irreparables en el motor. Esta situación es probablemente conocida por todos aquellos que se hayan enfrentado a un coche averiado. Normalmente los colores de los iconos suelen referirse a la gravedad del problema: en rojo hablamos de una avería grave o fallo de seguridad, en amarillo se trata de un problema no urgente, mientras que cuando vemos un piloto azul o verde, se trata de sistemas que se hayan conectado al panel.
¿Pero qué significa cada fallo? ¿Cómo saber qué le ocurre al coche averiado recientemente? El prototipo que han diseñado consta de tres subsistemas, que emplean a su vez ochenta variables y sesenta y cuatro reglas. En función del testigo iluminado, y las preguntas que va haciendo el conductor en la aplicación, esta nos guía nos va informando sobre las medidas que podríamos ir tomando. Por ejemplo, «rellene el depósito de líquido limpiaparabrisas», «conduzca con precaución y lleve el coche al taller por fallo en el ASR» (control de tracción) o «problema en el circuito de frenos».
Los científicos, que han publicado sus resultados en la revista Applied Mathematics and Computation, destacan que el prototipo ofrece unas pautas que podemos seguir en el caso de que nos encontremos con el coche averiado. Son, en otras palabras, meras indicaciones para ayudarnos a identificar el problema, aunque no pueden interpretarse como fiables en el 100% de los casos. En el futuro, los investigadores quieren ajustar los modelos desarrollados a vehículos y marcas específicas, por lo que es posible que esta aplicación mejore sus interpretaciones y pautas a medio y largo plazo.
Imágenes | David van der Mark (Flickr), Stux (Pixabay)
