El sistema educativo tiene que ser capaz de proporcionar herramientas para que los alumnos desarrollen su talento. En este sentido, la Fundación Junior Achievement dedica su tiempo a formar a estudiantes en el mundo del emprendimiento.
¿Por qué es importante fomentar el emprendimiento y la creatividad desde la edad escolar? La educación tradicional, sustentada en el modelo industrial, ha demostrado que no funciona y, ahora, los alumnos deben ser capaces de manejar sus propios recursos, trabajar en equipo y emprender. El sistema educativo debe proporcionar las herramientas necesarias para que los alumnos desarrollen su talento: inteligencia emocional, creatividad y espíritu emprendedor.
Enseñar a los niños a emprender no consiste sólo en montar una empresa, sino en conducirles hacia un futuro donde sean capaces de tomar, por sí mismos, una iniciativa con las actitudes necesarias para ello. Con el objetivo de fomentar la vocación emprendedora, la Fundación Junior Achievement lleva cien años impulsando el emprendimiento desde Estados Unidos, y en 2001 llegó a nuestro país. Desde entonces, aproximadamente 5.000 niños, con una edad superior a diez años, han podido disfrutar de su programa.
Inspirar a los jóvenes para enfrentar el mundo laboral
Las organizaciones de la fundación desarrollan programas educativos centrados en tres aspectos: uno enfocado a la vida laboral, otro al emprendimiento y, por último, a la educación financiera. ¿El objetivo? Motivar a los más jóvenes para su inserción en la economía global.
Junior Achievement beneficia a más de 10 millones y medio de estudiantes de 122 países diferentes y sus programas educativos comienzan en la etapa de educación primaria hasta llegar al periodo universitario. La directora, Blanca Narváez Vega de Seoane, ha destacado recientemente en una entrevista que, lo que realmente aprenden sus alumnos, son los valores del emprendimiento. “Hay mucha gente que tiene la idea de emprender para forrarse y nosotros creemos que emprender con éxito es una consecuencia de una propuesta de valor real, honesta y valiosa”.
En este sentido, “les damos un problema y ellos tienen que buscar una solución”. La experiencia que reciben los alumnos es real y, de hecho, ya ha habido casos de éxito de empresas convertidas en realidad. Por ejemplo, un grupo de chicos de 17 años crearon una app en busca de soluciones para una compañera de clase que padece leucemia y que cuando necesita una transfusión el hospital no dispone de sangre de su grupo. “Otros diseñaron un reloj con tinta termosensible que indica, según la incidencia de los rayos uva, la protección necesaria”, comenta la directora. Después, negociaron con la compañía Isdin para que incluyeran el reloj en los envoltorios de sus productos.
Programas educativos
Dentro de los programas que tiene la fundación, podemos destacar los siguientes:
Educación primaria. Uno de los programas que más funciona es ‘Nuestra Comunidad’ dirigido a estudiantes de entre siete y nueve años. A través de esta iniciativa aprenden cómo funciona una comunidad y su papel como ciudadanos y trabajadores. A partir de los nueve años, pueden beneficiarse del programa ‘Nuestros recursos’ cuya finalidad es que los estudiantes desarrollen competencias emprendedoras. No obstante, Blanca Narváez indica que para incluir en el mercado una empresa “tienen que hacerlo cuando sean mayores de edad o bien, arropados por instituciones escolares, APAS o por la propia Junior Achievement”.
Secundaria, Bachillerato y FP: El programa pedagógico ‘Miniempresas’ está dirigido a aquellos estudiantes que quieran vivir la experiencia real de montar su propia empresa. Los emprendedores tienen que desarrollar un producto o servicio que responsa a una necesidad concreta de la sociedad, crear un plan de empresa y las estrategias necesarias para insertar el producto final en el mercado. Con el programa ‘Simulador’ los alumnos de 4º ESO y Bachillerato podrán reproducir el ciclo económico de las empresas y tomar decisiones relacionadas con la producción y el marketing.
Universidad. El programa ‘StartupProgramme’, realizado en 17 países europeos y con numerosos casos de éxito, fomenta la creación de un plan de negocio con el que competirán con el resto de universidades.
Otros programas de emprendimiento
Telefónica también apuesta por impulsar el emprendimiento de los más jóvenes a través del programa Talentum Startups que convierte las ideas en proyectos reales. Los jóvenes pueden optar por Talentum Startups Short Track, una beca de tres meses de duración donde podrá desarrollar su propio proyecto tecnológico con la ayuda de un mentor experto. Por otro lado, en la beca Talentum Startups Long Track, los jóvenes emprendedores podrán transformar su idea en proyecto en un periodo de seis meses.
