Un informe de GTM Research indica que en 2017 la energía solar alcanzará una capacidad, a nivel mundial, equiparable a la que tiene la energía nuclear.
La capacidad mundial de la energía solar no deja de aumentar. El descenso de precios de los paneles solares, junto a un mayor perfeccionamiento en las técnicas de construcción, han propulsado el inicio de un buen número de proyectos en los últimos años. A esta tendencia se suma también la mayor concienciación de los estados hacia el cambio climático. Las posiciones frente a las energías renovables ahora son más favorecedoras.
En medio de esta fiebre desatada por la energía solar, países como China, India o Estados Unidos han dado luz verde a proyectos verdaderamente megalómanos. Y en este contexto, llega el informe Global Solar Demand Monitor, publicado por la consultora especializada GTM Research.
Las estimaciones de GTM Research apuntan que la energía solar alcanzará antes de que termine 2017 los 390 GW. En comparación, la capacidad instalada de la energía nuclear en todo el mundo es de 391,5 GW, según el Nuclear Energy Institute, una organización estadounidense especializada en esta industria. Así, se puede decir que la solar igualará en capacidad mundial a la nuclear antes de fin de año.
Lo cierto es que esto no quiere decir que la energía solar produzca más electricidad **. La nuclear genera 2.476.671 GWh de electricidad** , mientras que la solar solo llega a 375.000 GWh. Sin embargo, la Agencia Internacional de la Energía espera que para 2050 cambien las tornas. En esta fecha, la energía procedente del sol será la que más electricidad genere de todas las fuentes posibles.
En 2015, la energía solar ya vio un enorme aumento en capacidad, de 50,3 GW. Al año siguiente la cifra fue aún mayor, de 77,8 GW. Para 2017 se espera que este número se atempere, con un incremento de un 81,1 GW. Pero lo cierto es que el ritmo de crecimiento es importante y, según GTM Research, se mantendrá firme. Según los cálculos de la consultora, para el año 2022 se alcanzarán 871 GW de capacidad. Se trata de un gran salto respecto a lo que hay ahora, pues se doblará la capacidad mundial.
La creciente popularidad de la energía solar tiene un componente económico del que no se puede sustraer. Hace unos años la instalación de una planta requería una inversión cuantiosa y de dudoso retorno, especialmente sin incentivos oficiales. Pero hoy en día el precio de los paneles se ha abaratado tanto que se pueden crear proyectos a gran escala, más rentables.
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