Mascarillas y guantes desechables, un problema para el planeta

Hasta hace unos meses, en los supermercados nos pedían que cambiáramos las bolsas de plástico por las de papel o tela. Hoy, todos nos vemos obligados a coger guantes desechables antes de entrar al mercado. ¿Qué ha cambiado?

Hay que tener en cuenta que nos encontramos en un momento excepcional. Una pandemia sigue maltratando a gran parte del mundo y el uso de la mascarilla es prácticamente obligatorio. Pero, en realidad, ¿hace falta que tanto las mascarillas como los guantes sean desechables y, además, de plástico?

La respuesta es no. Hay muchas alternativas a esto. Entre ellas destacan el uso de mascarillas de tela o reutilizables y la sustitución de los guantes de látex o plástico por un lavado de manos más frecuente. Además, es fundamental saber qué mascarilla comprar según tu situación.

Los expertos en ecología temen que el uso de este tipo de productos provoque un aumento de la contaminación y alertan de que estos desechos ya están suponiendo una amenaza para la vida marina.

guantes desechables

Guantes de látex y mascarillas desechables en el mar

Desde que comenzó la desescalada, diariamente se han encontrado en el Mediterráneo flotando mascarillas y guantes. A los ecologistas les preocupa que dentro de poco haya más “restos de la Covid” que medusas.

La ONG francesa Opération Mer Propre fue la primera en dar la alarma de lo que estaba sucediendo. Desde la organización buscan que la gente empiece a usar mascarillas reutilizables y que los guantes se sustituyan por un lavado de manos más consciente y reiterado.

El problema lleva años entre nosotros

Ya en 2018, según una estimación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, se alertaba de que al Mediterráneo llegan 570.000 toneladas de plástico cada año, lo que equivale a tirar casi 34.000 botellas de plástico al mar cada minuto.

mascarillas desechables

El año pasado, Movistar+ y la BBC le declaraban la Guerra al plástico en un documental formado por 3 episodios en los que se retaba a unos vecinos de Bristol a disminuir su gasto de plástico.

El documental invitaba a reflexionar sobre el consumo que hacemos diariamente y explicaba que cada segundo arrojamos unos 200 kilos de plástico al océano. Dicho con otras palabras: cada minuto tiramos al agua el equivalente a un camión de basura, es decir, unos 8 millones de toneladas al año.

Ahora lo que se teme es que la pandemia sume otro tipo más de contaminación a nuestro planeta. Todavía estamos a tiempo de salvar nuestro entorno, hagámoslo.

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