De momento Holanda ha pisado el acelerador en lo que a energías renovables se refiere.
En la carrera para ganarle el pulso al tema de las energías renovables hay algunas geografías que están muy por delante de la media mundial. Mientras unos se posicionan como los negacionistas por excelencia del cambio climático, otros invierten en lo que vendrá a ser el futuro de la generación eléctrica.
Los Países Bajos han sido, por excelencia, uno de esos lugares comprometidos con el pacto por el medio ambiente. Ya fue el primer país del mundo que se adelantaba a su fecha límite en la renovación del sistema de transporte vía ferrocarril; su previsión era que en 2018, el 100% de los trenes de Holanda funcionasen con energía renovable. La realidad ha sido que un año antes de lo previsto, concretamente el 1 de enero de 2017, el objetivo ya se había cumplido.
Ahora, Holanda ha conseguido otro hito. El pequeño país al norte de Europa ha inaugurado el parque eólico más grande del país. Con 150 aerogeneradores, este parque situado a 85 kilómetros de la costa de Groningen, tendrá la capacidad de generar energía eléctrica para 785.000 hogares en el país. Con este ya son cuatro los parques eólicos marinos que controla el país europeo. Los tres primeros ya tienen la capacidad de producir 300 megavatios de energía: la nueva incorporación suma otros 600 megavatios al año.
En cualquier caso, el Gobierno del país no quiere parar en su proyecto de generación de energías renovables de origen eólico. Ya se tiene la aprobación de otros cinco parques marinos que empezarán a construirse en los próximos años. El objetivo, a corto plazo, es lograr que una gran parte de la energía del país tenga origen en estos proyectos: para el año 2023, al menos el 16% de las necesidades energéticas de Holanda deberían estar cubiertas por un medio sostenible.
Teniendo en cuenta la progresión que ha llevado el país en los últimos años, especialmente con el caso de los trenes, lo más seguro sea que su objetivo se vea logrado en poco tiempo.
