Las crisis invitan a reinventarse. España necesita resetearse, volver a descargar las killer apps que consiguieron que la transformación de su economía fuera una de las más exitosas (junto a la de Corea) de todos los países de la OCDE durante la segunda mitad del siglo pasado. En un par de décadas España pasó de ser “emergente” a ser “desarrollado”, incorporándose al Top 10 mundial de las potencias económicas. Ahora toca de nuevo reinventarse y esto tendrá que pasar por otra fórmula.
De ahí la idea de crear Start Up Spain: un evento que apunta a (re)pensar esa España 3.0, más volcada en el mundo de las startups, de la innovación y de la tecnología. Start Up Spain nació así como una serie de encuentros entre emprendedores, unos encuentros con un doble objetivo: alimentar el debate con nuevas ideas y lograr un impacto en las políticas de fomento de la actividad emprendedora: los emprendedores, las empresas tecnológicas y el capital emprendedor deben ocupar un lugar prioritario en este “reseteo” del país.
Start Up Spain nació en noviembre de 2011 con la primera conferencia Start Up Spain 2011. ESADE Business School y la Fundación Rafael del Pino, en colaboración con Campus Party, acogieron a cerca de 350 asistentes, entre los que había emprendedores, business angels y family-offices. Gracias al streaming en directo proporcionado por Campus Party, se pudo llegar a más de 350 seguidores virtuales y se consiguió ser trending topic en Twitter con el hashtag #startupspain. En cada evento se busca centrar la conversación sobre un tema concreto, siempre conectando con una dimensión internacional. En aquella ocasión les preguntamos a los emprendedores extranjeros que habían creado startups en España por qué lo habían hecho y qué deberíamos hacer nosotros, los españoles, para que hubiera más cómo ellos, interesados en emprender en nuestro país.
En la segunda edición, también celebrada en el Auditorio Rafael del Pino en Madrid en abril 2012, se colgó el cartel de completo por segunda ocasión y se consiguió doblar el número de seguidores online, que esta vez fueron alrededor de 800. En esta ocasión se invitaron fondos extranjeros de venture capital de EEUU, Inglaterra, Francia, Israel, Finlandia o Alemania, así como business angels, también extranjeros, a explicar por qué habían apostado o querían apostar por startups españolas.
Para esta tercera edición, el 26 de septiembre, los pronósticos son alentadores: en solo dos días se inscribieron 350 personas y el impacto en las redes sociales continúa creciendo. En total ya hay más de 800 personas inscritas. El tema en esta ocasión es el de la diáspora emprendedora española, es decir, hablaremos sobre los emprendedores que han creado sus startups en EEEU o se han ido de España a trasladar sus empresas a Palo Alto, Boston o Nuevan York. La idea es entender cómo comparan ambos ecosistemas, el de España y el de Estados-Unidos, entender sus encantos y desencantos.
Este apoyo a los eventos nos reafirma en la idea de que Start Up Spain nace en el momento preciso, que el emprendimiento es el camino para salir de la crisis. El apoyo no solo se mide con estas dos métricas de asistencia (real y virtual). Sobre todo, nos entusiasma el impacto que esta iniciativa tiene en los blogs especializados: los comentarios y retuits en la red social hacen que Start Up Spain se convierta en el evento que mucha gente espera para potenciar y reafirmar sus proyectos cuando las noticias parecen siempre negativas.
Start Up Spain da la palabra a los emprendedores. Hemos contado con emprendedores extranjeros asentados en nuestro país, a los que les preguntamos por qué han escogido España como país de lanzamiento de sus startups. Fruto de aquel encuentro fue un importante documento sintético que recogía las propuestas que aquellos emprendedores nos hicieron sobre la mejora de la actividad emprendedora en España: fueron Las 40 Principales medidas para potenciarlo. También hemos contado con la otra parte fundamental de cualquier startup: la inversión. Por eso, reunimos en abril de 2012 a los gestores de fondos de venture capital que han invertido en nuestro país: descubrimos la importancia clave de “pensar en global” para atraer la mirada de los fondos internacionales.
España tiene activos para resetearse. No son pocos. No debemos dejarnos achicar por el aluvión de malas noticias. En el ámbito del emprendimiento existe una cantera de talento creciente, dentro y fuera del país. Dentro de los activos que tiene el país no deja de llamar la atención, por ejemplo, que 3 de las principales escuelas de negocios del mundo son … españolas: IESE, IE y ESADE. Todas ellas están impulsando aceleradoras, fondos emprendedores, startups, etc. Antiguos alumnos de las tres escuelas han creado startups de importancia en España y fuera de nuestras fronteras. Son una atracción de talento global de primer orden sobre el que impulsar el emprendimiento, que hacen de España un lugar atractivo donde invertir.
Claro que también hay retos institucionales, laborales, fiscales y hasta educativos y sociales que superar: trabajemos en esa dirección para hacer que estos próximos años sean recordados como los años en que España started up.
