Los jóvenes Talentum malagueños obtuvieron por su app el segundo puesto del hackaton
Hola a todos: somos un grupo de Talentum de Málaga, estudiantes de Ingeniería Informática. Tras un largo e intenso viaje llegamos a nuestra primera Campus Party. No sabíamos muy bien a qué veníamos pero teníamos claro que iba a ser algo grande. Después de ver la programación, asistir a distintas charlas, conocer nuevas tecnologías, nuevos conceptos… sin darnos cuenta se nos empezaron a acercar representantes de las distintas empresas y hackatones que buscaban un grupo de desarrolladores. Más tarde ese mismo día nos vimos envueltos en el que iba a ser nuestro primer hackaton, una aplicación aparentemente sencilla para detectar caídas y accidentes que nos quitó el sueño durante un par de días.
El proyecto propuesto por la Cruz Roja pertenecía al hackaton de ayuda a la sociedad «Hacking for something Better«. Tras un intenso periodo de noches en vela y meriendas perdidas conseguimos finalizar un prueba de concepto para nuestra aplicación móvil con apoyo remoto para el cálculo de estadísticas de accidentes, geolocalización, servicios meteorológicos y explotación de datos en general. Sin duda ha sido una gran experiencia, y mientras esperábamos la decisión del jurado nosotros nos sentíamos ya unos ganadores simplemente por la oportunidad de estar en Londres, en el O2 Arena de la mano de una gran empresa como Telefónica.
Nuestra app Alerta Accidente, para entrar más en detalle, se trata de una app que utiliza el GPS, el giroscopio y el acelerómetro de un smartphone y que puede generar un envío de SMS o correo electrónico a un número o correo predefinido cuando el dispositivo tenga una deceleración brusca similar a la que se produce cuando circulas en una bici o en un vehículo a motor y se produce una parada súbita como la generada en un accidente. De este modo, emitirá una señal de preaviso audible de “cuenta atrás” antes de proceder al envío de la alerta.
Finalmente hemos sido galardonados con un segundo puesto, lo que quiere decir que el esfuerzo invertido ha merecido, sin duda, la pena.
