En junio de 2015, el Centro de Innovación y Tecnología de Telefónica ya estaba plenamente operativo, realizando pruebas y test, con el objetivo de que todos los productos y servicios que salgan al mercado cumplan con los estándares de calidad requeridos. Carlos Melendo desentraña todos los misterios del edificio.
Carlos Melendo, Director de Equipamiento y Servicios de Red de Telefónica, nos cuenta todas las funcionalidades del Centro de Innovación y Tecnología, un proyecto que consiguió aunar a Telefónica I+D y Telefónica Tecnología en un mismo espacio, con el objetivo de optimizar los procesos de ambos equipos.
El objetivo principal del Centro es generar una miniaturización de toda la red de Telefónica, con el fin de que los ingenieros puedan probar en entornos ‘reales’ todos los productos antes de que salgan al mercado. Algunos productos de los que hoy ya disfrutamos, como Movistar+ o Screen Fusión, fueron testeados anteriormente en estas instalaciones.
El tiempo de pruebas de un producto puede variar, desde una semana a un año, dependiendo de las características del mismo. El tiempo medio de testeo de un router normal suele variar entre los 3 y 6 meses. Según Melendo, “antes de lanzar, por ejemplo, un router al mercado, realizamos tres ciclos completos de testeos de homologación”.
Por poner un ejemplo, el sistema de videoconferencia múltiple que pudimos observar en el laboratorio ya lleva alrededor de dos años en periodo de prueba.
Multitud de salas componen el puzzle necesario para la realización correcta de las pruebas en el centro. Estas son algunas de ellas.
La simulación de la radiofrecuencia
La sala de certificación de radio del Centro de Innovación genera unas ondas de radio que simulan a la perfección (a escala) las señales que emiten las centrales. Gracias a esto, los más de 60 profesionales que efectúan las pruebas pueden disponer de un escenario de red real en el que testear sus simulacros, en cualquiera de sus puestos de trabajo dentro del edificio.
Esta miniaturización del servicio proporciona el material necesario para que todas las pruebas puedan ser llevadas a cabo en entornos reales, de manera que los ingenieros puedan determinar con exactitud su funcionamiento en el escenario real.
El núcleo del centro de innovación
La sala CPD (centro de procesamiento de datos) reúne la mayoría de órganos vitales que garantizan el correcto funcionamiento del centro. Protegida por una doble esclusa, alberga el núcleo de todas las pruebas con las que trabajan. Sesenta profesionales garantizan que todos los procesos que se llevan a cabo en esta sala transcurran de manera óptima, permitiendo que sus otros 200 compañeros puedan trabajar con efectividad.
El Centro de Innovación y Tecnología cuenta con tres salas CPD, entre las cuales se distribuyen más de 1.540 kilómetros de cable, entre fibra óptica, cable de comunicaciones y cable coaxial, y más de 6.500 máquinas.
Esta sala es capaz de replicar de manera exacta toda la red de Telefónica, a excepción de la señal de radio, de la que se encargan en la sala anteriormente comentada. Por ejemplo, uno de los procesos que realizan las máquinas que se encuentran en la sala es autenticar las tarjetas SIM de los usuarios, facilitando la conexión entre dos terminales distintos en cualquier punto del planeta. Con únicamente 7 bastidores, son capaces de replicar una red completa a escala.
Bajo el suelo, protegidos de cualquier incidente, se encuentran los cables que facilitan las conexiones, mientras que en el techo están solo los dedicados a la alimentación de los equipos. Aproximadamente media sala se dedica únicamente a replicar los servicios añadidos de Telefónica, como el buzón de voz, el servicio Ya Voy, etc.
Los motores del edificio
La sala de motores del centro conserva aún el motor diésel original que se instaló en el edificio, dedicado para la alimentación del mismo. Pero es tal la potencia energética que necesitan los procesos que se llevan a cabo en su interior que Telefónica ha tenido que instalar otro motor adicional para garantizar la correcta distribución de la energía a todas las salas.
Por otra parte, la sala de baterías alberga 6 módulos de 24 baterías cada uno, con una función muy específica. Si se fuera la luz en el edificio, un apagado repentino podría resultar fatal para la simulación de la red. Por ese motivo, en caso de que se corte la electricidad, las baterías garantizan un correcto funcionamiento durante dos horas, tiempo suficiente para que los técnicos puedan realizar un apagado controlado y eviten que las máquinas sean dañadas.
Por último, en la azotea se encuentran dos elementos fundamentales para el correcto funcionamiento del edificio. Por un lado, todas las máquinas de refrigeración, y por el otro, la antena que sirve como estación base 2, 3 y 4 G.
Desde el centro, aseguran que durante esta edición del Mobile World Congress podremos ver cosas interesantes en las que ya están trabajando, aunque de momento no pueden dar más detalles al respecto. Habrá que esperar a la Feria de Barcelona.
