El Forêt Blanche o bosque blanco será una torre que se construirá en París, repleta de árboles y arbustos.
Los retos que hoy en día tienen las ciudades se han de abordar desde otro punto de vista. El urbanismo no puede ser el que se estilaba décadas atrás. La contaminación se ha convertido en un problema acuciante y la cuestión energética también remueve sus cimientos.
De esta forma hay muchas novedades que entran poco a poco en las urbes. Los coches eléctricos se pueden considerar una de ellas, así como el fomentar otros medios de transporte, como la bicicleta. En cuanto a la contaminación, además de reducirla, hay que paliar la que ya existe y seguirá existiendo durante muchos años.
Una de las formas para hacerlo es instalando zonas arboladas en el centro de las ciudades. Normalmente esto se haría con parques, pero existe un problema: el espacio. En París han encontrado una solución y pasa por mirar hacia arriba. Si no hay espacio para construir en la superficie siempre se puede hacer como con las viviendas: edificar en vertical.
El proyecto se ha encargado a la firma italiana de Stefano Boeri Architetti, que tiene experiencia en trabajos similares. De hecho, esta compañía ya ha diseñado dos torres en Milán, inauguradas en 2014, que están cubiertas de árboles. En este caso, el llamado Bosco Verticale cuenta con 711 árboles , 5.000 arbustos de grandes dimensiones y 15.000 plantas. La superficie que cubren equivale a dos hectáreas.
En París se construirá el Fôret Blanch o bosque blanco, que guarda la misma filosofía de las torres milanesas. Será un edificio de 54 metros de altura y albergará alrededor de 2.000 plantas, árboles y arbustos.
El edificio será de madera y tendrá grandes ventanas para que la luz pueda entrar sin complicaciones. Así, la ventilación del complejo también será adecuada. Está previsto que en los pisos bajos del Fôret Blanche haya comercios , mientras que en los pisos más altos habrá apartamentos de lujo.
La idea es que haya en el edificio un buen número de especies vegetales. De esta forma servirán a las aves de refugio al tiempo que ayudarán a paliar la contaminación. Es una forma de construir en las ciudades, con el propósito de aliviar las concentraciones de dióxido de carbono.
Imágenes: Stefano Boeri Architetti
