La famosa nube dejó de ser un término desconocido hace tiempo para convertirse en la gran apuesta de futuro de muchas empresas. Ahora, la llegada de IBM Cloud no hará sino perfeccionar la estrategia en la nube de Kubernetes, que se perfila como el proyecto más popular en la Cloud Native Computing Foundation.
La carrera por convertirse en el primer proveedor de servicios en la nube ha dado un paso más. Y es que IBM, por el momento, realiza importantes esfuerzos por ocupar este título, y los desarrolladores lo celebran. Tanto muchos de ellos como los equipos de ciencia de datos apostarán por IBM Cloud como ampliación a las capacidades de los contenedores Kubernetes.
Se trata de un servicio administrado directamente en la infraestructura de nube simple que permitirá agilizar y dar flexibilidad de manera significativa a los datos, aplicaciones y cargas de trabajo que requieren un rendimiento informático extremadamente alto.
Un buen encaje
La llegada de IBM Cloud no hará sino perfeccionar la estrategia en la nube de Kubernetes, que se perfila como el proyecto más popular en la Cloud Native Computing Foundation (CNCF), por su velocidad y la portabilidad entre sistemas que ayuda a los equipos a lograr.
La misma IBM ha reconocido el potencial que tienen estos contenedores para las cargas de trabajo nuevas y de uso intensivo de datos que requieren altos niveles de potencia de cálculo en los que el “metal desnudo” sobresale en la entrega. Un hándicap que requería una configuración considerable y una gestión constante de los equipos de desarrolladores, y que hizo limitar el uso del “metal desnudo” con aplicaciones complejas. Un problema sin solución hasta ahora.
Más control
IBM Cloud ha puesto solución a este problema y sí puede ejecutarse en nodos de “metal desnudo”. De esta forma, los desarrolladores cuentan con un mayor control sobre dónde residen sus cargas de trabajo y pueden aislar las mismas a servidores específicos.
Además, estos servicios en la nube permiten proveer a los equipos con todos los beneficios de un servicio de contenedor totalmente administrado y combinado con el rendimiento y seguridad del “metal desnudo”.
Sin duda, todo un mundo de nuevas y buenas noticias para los desarrolladores, que, a partir de ahora, podrán confiar un poco más en la seguridad de los servicios en la nube.
