Grabar y compartir. El vídeo es el contenido más compartido en la Internet actual, y cualquiera puede grabarlo, incluso desde tu computadora.
En el pasado, para compartir algo de tu pantalla, la manera más rápida era con una captura o screenshot. Los teclados antiguos incluso contaban con una tecla que hacía esa función, la mítica Impr Pant. Luego sólo tenías que pegar el resultado en un archivo de imagen.
Pero hoy todo es vídeo. Si miras en redes sociales como Instagram, Facebook o Twitter, el vídeo es el rey. Y qué decir de WhatsApp o Snapchat o la popularidad de páginas como Twitch o YouTube.
Grabar vídeo es tan simple como disponer de un smartphone. Y los ordenadores portátiles actuales integran su propia cámara web. A eso hay que añadir las herramientas que permiten grabar vídeos cómodamente.
De tu pantalla a Internet
En el pasado hemos hablado de apps y programas que sirven para grabar vídeos tipo screencast o videocast, un formato que funciona muy bien en Internet. Un ejemplo es Screencastify, una app que se integra en Google Chrome y. Nos ayuda a grabar vídeos de tu ordenador.
Eliges la fuente, grabas, editas el vídeo y lo compartes donde quieras. Así funcionan herramientas como Screencastify. En este caso, la fuente a grabar puede una pestaña abierta en Google Chrome, el escritorio de Windows, macOS y Chromebooks o incluso tu cámara web. Es más, puedes combinar el vídeo con el audio de tu micrófono para así hablar a cámara o explicar con voz en off lo que sucede en pantalla.
Otra opción que ofrece Screencastify es la posibilidad de grabar el escritorio o una pestaña del navegador y, al mismo tiempo, ver en pequeño el contenido de tu cámara, algo habitual en screencasts que puedes encontrar en YouTube.
Entre las particularidades durante el proceso de grabación, Screencastify añade funciones propias de herramientas profesionales por el estilo, como la mítica Camtasia de TechSmith. Además de grabar, cuando hagas clic en algo se destacará visualmente. También podrás dibujar en pantalla para destacar o señalar un elemento e incluso resaltar el cursor del ratón mientras se mueve.
Todo el proceso es rápido y simple, ideal si no tienes mucho tiempo para dedicar a grabar vídeos. Y cuando termines, Screencastify guardará el vídeo automáticamente en Google Drive. ¿Quieres que lo vea todo el mundo? En ese caso, podrás subir el vídeo a YouTube. Y si prefieres editarlo por tu cuenta, puedes exportarlo en formato MP4, guardar sólo el audio en MP3 o incluso obtener un GIF animado para compartir en Twitter.
Dos sabores a elegir
Para uso personal o profesional, Screencastify dispone de dos versiones a elegir. La primera, la gratuita, nos permite grabar vídeos de hasta 5 minutos, más que suficiente para el contenido audiovisual que se difunde por Internet. Pero lo mejor es que no hay marca de agua, los vídeos se graban en HD y puedes subir los vídeos a Google Drive o YouTube libremente.
Así pues, ¿para qué sirve la versión de pago de Screencastify? Primero, no hay límite de tiempo para los vídeos grabados. Segundo, puedes fusionar y reordenar vídeos con su editor. También podrás eliminar fragmentos y añadir texto encima del vídeo.
Otro ámbito de aplicación de Screencastify es el educativo. En su página oficial cuenta con un apartado dedicado donde explica, por ejemplo, de qué manera pueden usarse los vídeos grabados con Screencastify en el ámbito educativo.
Encontrarás más información sobre Screencastify en su página oficial. Además, podrás resolver cualquier duda en su ayuda, repleta de guías y tutoriales.
