Uno de los requisitos que debe cumplir la conexión WiFi de tu vivienda u oficina es llegar a todas partes. Pero no es algo tan simple en casas y superficies de grandes dimensiones. Las redes WiFi tienen sus limitaciones espaciales, por lo que a más distancia, llega menos señal. Lo que se traduce en menos velocidad. Una de las soluciones más populares para hacer frente a este problema consiste en montar una red Mesh o red de malla. Y aquí entra en acción el estándar EasyMesh.
Las redes de malla son simplemente una red formada por repetidores WiFi que se colocan a lo largo y ancho del lugar en el que quieres cobertura WiFi absoluta. Ningún rincón sin que llegue la señal de banda ancha para ver televisión por Internet, jugar online o realizar videollamadas sin problemas. Pero las redes WiFi de malla actuales son más inteligentes, ya que gestionan la conexión para que la señal sea homogénea sin importar dónde estés ni los dispositivos conectados simultáneamente.
Una de las claves para que las redes de malla sean eficientes y la conexión con tu router sea perfecta, consiste en que todos los repetidores empleen el mismo protocolo. Y aunque cada fabricante tiene su propio protocolo, existe un estándar que casi todos ellos comparten, EasyMesh. Usar este estándar facilita utilizar dispositivos de varios fabricantes y que sean compatibles entre sí.
Una red de repetidores inteligentes
La diferencia entre una red de repetidores WiFi y una red de malla o red Mesh es que cada repetidor o nodo se sincroniza con los demás para que actúen como una única red WiFi, la que facilita tu router. Y aunque esto es fácil de decir, en la práctica no es tan simple. Cada repetidor debe acceder al canal y ancho de banda ideal para que la red WiFi ofrezca toda la velocidad disponible sin importar dónde estés.
Por otro lado, sin importar el número de repetidores instalados, todos deben ofrecer el mismo nombre de red, cifrado y contraseña que el router desde el que te conectas a tu proveedor de Internet. Y para que todo esto funcione como la seda, el estándar EasyMesh es clave. De esta manera, tener todos tus aparatos y dispositivos conectados a Internet se convierte en una tarea más simple, ágil y segura que si te limitaras a instalar repetidores tradicionales.
Cada fabricante tiene su propio protocolo para gestionar las redes de malla, como OneMesh (TP-Link), TrueMesh (Amazon), WiFi Mesh (D-Link), Mesh WiFi (Netgear) o Mesh (Xiaomi), pero existe un protocolo que muchos fabricantes soportan y que es el estándar que certifica y recomienda la WiFi Alliance, es decir, la asociación que reúne a fabricantes, desarrolladores y proveedores de productos y tecnología WiFi. Así, cuando vayas a instalar tu propia red de malla, procura que los repetidores o nodos que instales sean compatibles con EasyMesh.
EasyMesh: el estándar oficial
EasyMesh es el nombre que la WiFi Alliance dio a su estándar para dispositivos que cumplen la especificación MAP, Multi-AP o IEEE 1905.1. Aunque se trata de conexiones WiFi como la que proporciona el propio router, hay particularidades de funcionamiento y gestión del ancho de banda que hace que esa misma conexión sea distinta al WiFi como tal. Mientras que la red WiFi tradicional se compone de un punto de conexión, que suele ser el router que tienes en casa, la red de malla tiene un controlador y dos o más agentes. El controlador es el propio router y los agentes son los nodos o repetidores WiFi que instalamos por toda la casa.
Así, el papel de EasyMesh es que el controlador y los nodos funcionen todos a una. En la práctica, para el usuario, hay una única red y un único punto WiFi al que conectarse. Pero la realidad es una compleja red de aparatos conectados para satisfacer tu demanda de banda ancha inalámbrica. Esto implica que la red de malla haga cambios, transparentes para ti, cambiando de canal WiFi o moviendo las conexiones de los dispositivos a otro nodo. Por ejemplo, cuando te mueves por casa con tu consola portátil. Seguirás teniendo cobertura pero si cambias de habitación, se conectará a otro repetidor sin que notes el cambio.
Como decía antes, cada protocolo de cada fabricante tiene sus particularidades. Y sus incompatibilidades entre marcas y modelos. Así, utilizar repetidores EasyMesh te garantiza que todos ellos funcionen bien entre sí. Sin importar la marca o modelo. Y manteniendo la comodidad, facilidad de uso y seguridad que ofrecen las redes de malla en grandes superficies o viviendas con varias plantas. Gracias a ello podrás disfrutar de la mejor conexión al ver contenidos, trabajar o durante una sesión de gaming.
