La compra de Skybox por parte de Google es uno de los últimos movimientos de las grandes corporaciones por monetizar el espacio. En los próximos 10 años veremos grandes avances en comunicación, turismo y business intelligence
Durante el siglo XX la carrera espacial tuvo dos actores principales, EE.UU. y la URSS. Si bien hubo empresas privadas grandes y pequeñas que proveían a los primeros de, por ejemplo, motores y trajes espaciales, a lo largo de los años todo avanzaba en función de lo intensa rivalidad entre las dos grandes potencias y un presupuesto que parecía infinito.
En el siglo XXI, con la URSS fuera y Rusia a medio gas, llegaron los planes de austeridad a la NASA. Por suerte, los avances se siguieron sucediendo gracias a las alianzas internacionales como la de que hizo posible la ISS. Con la jubilación de los transbordadores espaciales se dio el pistoletazo de salida a la nueva carrera espacial, esta vez liderada por las empresas privadas.
A mediados de junio Google compró la empresa de satélites Skybox, por 500 millones de dólares. Skybox , fundada en 2009, surgió como un proyecto de final de máster en la Universidad de Standford. En este tiempo lograron lanzar un microsatélite para la captación de imágenes de alta resolución y tienen ambiciosos planes para convertirse en el acceso a la información sobre los cambios que suceden en la superficie de nuestro planeta.
Esta no es la primera «compra espacial» de Google. En abril compró la empresa Titan Aerospace, por la que también estaba interesada Facebook, por una cifra que no se ha dado a conocer. Hacía tiempo que se rumoreaba que Google estaba pensando comprar alguna empresa de satélites para poder mejorar algunos de los servicios que ofrece, como Google Maps. Sin embargo, la empresa de Mountain View no se queda aquí, ya que gracias a lo que le aportan ambas empresas espera ofrecer a medio y largo plazo otros servicios como acceso a Internet en zonas remotas y asistencia en catástrofes.
Google no es la única empresa que tiene interés en proveer acceso a Internet a todo el planeta; Facebook también tiene el objetivo puesto en llegar al espacio. Mark Zuckerberg ha hablado en varias ocasiones de sus ambiciosos planes para llevar Internet a cada habitante del planeta.
Para lograr esta compleja tarea Facebook se apoyaría en drones, satélites y tecnología láser para cubrir todo el planeta. Para ello, han puesto en marcha el proyecto internet.org, y cuenta con el respaldo de grandes empresas privadas como Nokia, Ericsson, Qualcomm, Mediatek y Opera.
Otros actores de la carrera espacial
Por otro lado, están las empresas cuyo modelo de negocio no está en mirar a la Tierra u ofrecer Internet. SpaceX, la empresa fundada por el visionario Elon Musk (también de Paypal y Tesla Motors) ha sido uno de los grandes impulsores de los viajes espaciales. Su nave espacial, SpaceX Dragon consiguió llevar suministros a la ISS en el 2012 convirtiendo SpaceX en la primera empresa privada en completar una misión de este estilo.
Virgin Galactic no tiene su origen en una .com pero lleva años preparando viajes suborbitales tripulados y en un futuro planea ofrecer también viajes orbitales. Por medio de sus naves SpaceShipOne y SpaceShipTwo promete rebajar el precio de viajar al espacio, colocando en una orbita suborbital 230 Kg. a una pequeña fracción de su precio actual.
Al igual que Skybox, la empresa Planet Labs tiene también como objetivo crear una red de nanosatélites. A medida que la miniaturización se consolida, será cada vez más barato colocar nanosatélites en órbita y más empresas como estas verán reducidas sus barreras naturales de entrada.
Como indican en VentureBeat, las grandes empresas involucradas en el mercado espacial son conscientes de que más allá de imágenes por satélite, los clientes quieren soluciones. Por ello la empresa DigitalGlobe compró Spatial Energy focalizada en ayudar a las mayores empresas energéticas del mundo a ahorrar costes, tiempo y esfuerzo analizando complejos datos geoespaciales.
Monsanto ha sido otra empresa que ha apostado fuerte por los datos que puede obtener del espacio y compró la empresa Climate Corporation especializada en los análisis de campos agrícolas para los productos de las aseguradoras.
Según datos de SpaceWorks en 2013 se lanzaron al espacio 92 nanosatélites, es decir, un 269% más que el año anterior. Según las estimaciones de compañías privadas y programas espaciales en los próximos seis años se lanzarán al espacio cerca de 2.750 cubesat, la mayoría de ellos para uso comercial como la observación de la Tierra.
La nueva carrera espacial por parte de empresas privadas y también públicas va a traer sin duda grandes beneficios y aportaciones. En blog Think Big ya os hemos hablado anteriormente sobre la democratización del espacio que representarán los nanosatélites, o diversos proyectos como O3b y Outernet para llevar Internet a todo el planeta desde el espacio de manera gratuita.