Algunos ganaderos han empezado a pastorear con drones, sustituyendo los viejos métodos por estos aparatos voladores sin piloto.
Juntar y guiar alrededor de 1.000 ovejas en un terreno de más de 80 hectáreas no es sencillo. En Nueva Zelanda, donde las propiedades son extensas y abundan los grandes espacios para practicar la ganadería, se utilizan hombres a caballo para reunir al rebaño, así como perros pastor. Hasta de vehículos motorizados a cuatro ruedas se sirven los ganaderos para dirigir a sus animales. Sin embargo, está empezando a ponerse en marcha un nuevo método y por encima de las ovejas ya sobrevuela el zumbido un drone que hace las veces de los ladridos del perro.
Los usos civiles de los drones han explotado en los últimos años y el campo no se ha quedado al margen de esta tecnología. De hecho el sector agrario fue de los primeros en los que se realizaron pruebas. En Japón se empezaron a utilizar estos dispositivos en los años 80 para incrementar el rendimiento de los cultivos. A partir de entonces Yamaha, la compañía que llevaba las riendas de este despliegue, ha ido mejorando sus productos, que ahora son capaces de arrojar fertilizantes y pesticidas.
Hoy en día, aparte de los nipones otros fabricantes han desarrollado drones capaces de monitorizar un buen montón de hectáreas, vigilando que no haya plagas y recogiendo información sobre las condiciones del terreno, desde la humedad a la temperatura. Se puede decir que los vehículos aéreos no tripulados han entrado con fuerza en la agricultura.
La ganadería parecía un sector menos propenso para el uso de esta tecnología, pero esto era antes de que a un puñado de pioneros se le ocurriera pastorear con drones. En un artículo de The Wall Street Journal se recogen las declaraciones de Thomson, un ganadero de 22 años. Ha fabricado su propio drone y lo utiliza para empujar a las ovejas hacia donde quiere. Este joven tiene claras las ventajas. A los dispositivos no hay que darlos de comer como a un caballo, por no hablar de que cubren sin problemas el terreno montañoso.
Cuando el dispositivo se acerca a menos de un metro de las ovejas estas reaccionan. La idea de usar tecnología para pastorear no es nueva. En 1995 algunas universidades de Reino Unido lanzaron el proyecto ‘Robot Sheepdog’ y recientemente, investigadores también británicos, en colaboración con un equipo de Suecia, acoplaron dispositivos de rastreo en perros pastor y en ovejas. El objetivo era monitorizar los movimientos de los animales con el fin de descubrir patrones que pudieran introducir en algún tipo de robot para que hiciera el trabajo.
Al pastorear con drones el usuario no tiene que moverse del lugar. Tal vez los más veteranos estén más apegados a los métodos tradicionales, pero esta tecnología podría ser un incentivo para que los jóvenes se queden en el campo. Al menos así lo percibió el gobierno japonés, que fue el responsable de impulsar el uso de estos dispositivos a partir de los años 80.
Imágenes: looseends, airpod1 y flickr
