La desalinización solar permite apartar la sal del agua marina usando energía solar para llevar a cabo el proceso.
Desalinización solar. La expresión está entre el futurismo y la abstracción, pero lo cierto es que el significado no es complejo. El proceso consiste en separar la sal del agua de mar para que esta se pueda destinar a usos como el regadío o para la provisión a poblaciones. Y la fuente de energía que se emplea en este caso es el sol. La ventaja es que se trata de una fuente renovable y limpia la que proporciona el calor necesario para evaporar el agua, en lugar de utilizar la combustión de petróleo.
El proceso tiene lugar en un alambique especialmente preparado para soportarlo. En él se hace hervir el agua marina para dar lugar al vapor que se captura para después enfriarlo hasta la condensación, dando como resultado agua sin sal. Los minerales que contiene el líquido en principio, así como otras impurezas, permanecen en el alambique.
Hasta aquí nada nuevo. La novedad consiste en que la energía utilizada es la solar cuando normalmente se emplean combustibles fósiles, como en Arabia Saudí, donde la empresa española Abengoa está construyendo una planta desaladora en el país. La compañía asegura que la incorporación de energía solar conllevará un ahorro significativo de petróleo, pues actualmente Arabia Saudí consume 1,5 millones de barriles al día solo para hacer funcionar sus plantas desalinizadoras. Y es que en un estado donde gran parte del territorio es un desierto entre el 50% y el 70% del agua potable proviene de las desaladoras.
El proyecto de Abengoa en Arabia Saudí está previsto que se finalice en 2017. Para estas fechas la planta debería proporcionar 60.000 metros cúbicos (6 millones de litros) de agua al día a la ciudad de Al Khafji, en el noreste del país. Es significativo el hecho de que par este propósito se haya escogido a una empresa especializada en energía solar, como es la española, que cuenta con una larga experiencia en proyectos tanto a nivel nacional como internacional.
No es la única iniciativa de este tipo. En California destaca la empresa WaterFX, que precisamente está orientada a la construcción de proyectos de desalación con uso de energía solar. Lo tiene todo en el paquete, pues la compañía no está especializada en una de las dos patas de la tecnología –la desalación o la energía solar– sino que originalmente se ha creado para la desalinización solar.
WaterFX ofrece su producto Aqua4, que utiliza un colector de energía termosolar para concentrar el calor en un alambique y crear vapor. La compañía afirma que su método para desalar el agua es 30 veces más eficiente que la evaporación natural (el proceso que tiene lugar continuamente en la naturaleza, por el cual el agua del mar se evapora poco a poco a temperatura ambiente para pasar a formar parte del aire). La empresa garantiza que su tecnología puede producir casi 250.000 litros de agua al día.