El último asistente personal para el hogar tal vez no sea un altavoz sino un perro-robot, tal y como ha planteado Sony.
Hace años que Sony sueña con las mascotas robóticas. En 1999 la compañía lanzó Aibo **, un perro-robot capaz de funciones sencillas** y, especialmente, de hacer compañía a las personas. Se trata de un producto que ya no se encuentra en producción. De hecho, el fabricante dejó de darle soporte en 2014.
Se podría considerar un experimento. Aibo vendió más de 150.000 unidades a un precio de unos 2.500 dólares , hasta que se discontinuó en 2006. Pero Sony no ha dejado de pensar en un perro-robot. Tal vez el momento de su anterior apuesta no era el adecuado, quizá la tecnología no estaba madura. Sin embargo, hoy todo ha evolucionado. Tanto el mercado como la tecnología ofrecen nuevas oportunidades.
Para Sony ha llegado el momento de relanzar su perro-robot. Poco se sabe sobre el nuevo producto, que llegará en el primer trimestre del próximo año. Ni siquiera se sabe si se llamará Aibo o de otra forma.
Lo que sí parece claro es que será un perro-robot destinado a servir de compañero fiel a su dueño. Pero no solo eso. También dispondrá de conectividad a Internet , así como de funciones de asistente personal.
En definitiva, a través de la nueva mascota robótica se podrán controlar las luces y dispositivos de domótica. Se pude adivinar que el objetivo del perro-robot de Sony es competir con Amazon Echo o Google Home. Si estos dispositivos tienen forma de altavoz, su rival elegirá apelar a un animal que normalmente hace de mascota. A priori, más familiaridad no se puede pedir.
De hecho, en Japón existe ya una cierta cultura en torno a las mascotas robóticas. Aibo fue uno de los pioneros, pero hay otros ejemplos de productos pensados para acompañar a sus dueños. Está Paro, una foca blanca, que te permite acariciarla y reacciona ante tu interacción. La idea de sus creadores es que el usuario establezca una relación profunda con el animal robótico, con el fin de fomentar su empatía. También destaca Robear, entre cuyas funciones se cuentan la asistencia a personas con movilidad reducida.
Aunque lo cierto es que las costumbres japonesas, especialmente en el sector tecnológico, no siempre encajan en otros mercados. Cabe pensar asimismo que el proyecto de Sony se oriente exclusivamente al mercado nacional. En cualquier caso, el que exista un proyecto para crear un perro robótico dice alguna cosa de hacia dónde se encamina la electrónica de consumo.
