Investigadores de la Universidad de Dartmouth crean un sistema sensitivo móvil que evalúa el rendimiento de los trabajadores.
Mediante el uso de smartphones, pulseras de fitness y una aplicación personalizada, el sistema es capaz de monitorizar el comportamiento físico y emocional. Tener un registro del bienestar en el comportamiento de los trabajadores permitirá clasificar y determinar las subidas y las bajadas de rendimiento.
Esta nueva tecnología móvil supone un avance importante para conseguir ayudar a los trabajadores a optimizar su rendimiento durante su horario laboral. “Los sensores móviles y el machine learning pueden ser la clave para conseguir lo mejor de cada empleado”, ha declarado Andrew Campbell, el profesor de informática que lidera el equipo de desarrollo.
Clave para optimizar el rendimiento
Este nuevo enfoque está planteado como una alternativa a las estrategias de evaluación tradicionales. Los equipos de recursos humanos tendrán a su disposición un sistema sensitivo para trabajar de forma complementaria a otros recursos como las entrevistas personales y las autoevaluaciones.
Un smartphone realiza un seguimiento de la actividad física, la ubicación, el uso del móvil y la luz ambiental. La pulsera deportiva monitoriza el ritmo cardíaco, el sueño, los niveles de estrés y otras medidas corporales como el peso y el consumo de calorías. Las distintas balizas transmisoras de ubicación se distribuyen en distintos puntos de las oficinas de trabajo y suministran información sobre las horas de trabajo y sobre los descansos.
La tecnología de medida más objetiva
La nueva aplicación móvil está basada en una anterior llamada Student Life, que monitorizaba el rendimiento académico y el comportamiento de los estudiantes. La aplicación ha sido rediseñada para clasificar los niveles de rendimiento de los trabajadores a partir de un algoritmo de machine learning en la nube.
El sistema ha sido probado en más de 750 trabajadores de distinto rango en Estados Unidos durante un año. El estudio midió su rendimiento en base a distintos factores y ha sido capaz de determinar cómo el tiempo pasado en el lugar de trabajo, la calidad del sueño, la actividad física o el uso del móvil influyen en la actividad de los trabajadores.
El sistema proporciona a las empresas un mecanismo que mejora la retroalimentación entre los trabajadores y los dirigentes, así como la capacidad para detectar los comportamientos que pueden impulsar o frenar el rendimiento.
Los resultados del estudio han confirmado que esta tecnología es “una medida del rendimiento más objetiva y que permite una mayor comprensión del ambiente de trabajo y de la situación de los empleados tanto dentro como fuera de las oficinas”.