El ingenioso método utilizado en Sidi Ifni, Marruecos, para recoger agua a partir de la niebla permite aprovisionar la ciudad.
Sidi Ifni es una ciudad costera situada en el sudoeste de Marruecos de unos 20.000 habitantes. La región que la rodea, conocida con el mismo nombre, está sembrada de montañas semiáridas. La zona se llama AntiAtlas o Pequeño Atlas, en contraposición a la cordillera que atraviesa todo el noroeste de África. Como se puede suponer, el clima allí no es húmedo, no abunda la lluvia. En cambio, la niebla es un fenómeno meteorológico corriente y los habitantes de Sidi Ifni han aprendido a aprovecharlo para llenar de agua sus cañerías.
En Marruecos la niebla es un fenómeno que se produce frecuentemente debido a tres factores meteorológicos. El anticiclón de las Azores, una corriente de aire frío y el enorme obstáculo que suponen las montañas favorecen la formación de la niebla. Para combatir la escasez de agua, la asociación regional DSH (Desarrollo, educación y cultura) ha impulsado un sistema de recogida de agua diferente.
Se trata de recoger agua a partir de la niebla y se logra tendiendo mallas en una posición casi vertical con el fin de que las partículas de vapor de agua presentes en la niebla se condensen en las rejillas. De esta forma el agua queda atrapada, como en la tela de una araña –de hecho es un sistema similar al que utilizan estos insectos–, y se canaliza hacia una red de tuberías.
Estos tendales se colocan en lo alto de una montaña a 1.225 metros de altura. DSH afirma que la red para recoger agua a partir de la niebla que han construido en la región de Sidi Ifni es la más grande del mundo de su clase. Y es que la técnica empleada se empezó a usar en Chile hace unas dos décadas. Posteriormente se exportó a otros países, como Perú, Namibia y Sudáfrica.
Actualmente, en la región de Sidi Ifni hay 40 paneles de malla tendidos para recoger agua. El sistema se puso en marcha en el mes de marzo y aporta agua corriente a 92 hogares, lo que supone alrededor de 400 personas. Lo obtenido de la niebla se combina con lo que se saca de los pozos perforados para surtir a la red de tuberías.
El contar con agua corriente representa un progreso sustancial para los habitantes de esta zona. Antes tenían que emplear cuatro horas al día para llegar a un pozo y cargar con varias decenas de litros de agua. Estando libres de esta tarea pueden dedicarse a labores más productivas, como recoger el fruto de la argania spinosa, que produce el aceite de Argan, muy apreciado en cosméticos.
Aunque posiblemente el mayor beneficio de este método de recogida de agua es que los niños quedan libres de caminar durante horas al día, con lo que pueden asistir a la escuela. El objetivo de la asociación DSH es que la técnica se extienda a tantos pueblos como se pueda en el área.
Imágenes: Jan Mastnik y inigocia