El Barcelona Supercomputing Center fue creado en 2005. Tras recibir una inyección de 5 millones de euros a través del programa Consolider-Ingenio, esta entidad ha demostrado el potencial de las técnicas computacionales a nivel internacional.
Los avances en supercomputación llevan tres décadas revolucionando la investigación experimental. El uso de grandes ordenadores, como el Mare Nostrum, localizado en el Barcelona Supercomputing Center, ha conseguido acelerar numerosos proyectos científicos, mediante el uso de la modelización y de técnicas supercomputacionales.
Gracias a estos potentes superordenadores, resulta más sencillo avanzar en líneas de investigación relacionadas con la salud, la astrofísica o la ciencia e ingeniería de materiales. Sus aplicaciones son infinitas, ya que ha colaborado en iniciativas como la del Human Brain Project o la reciente misión Gaia de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Supercomputación española a la vanguardia internacional
El nacimiento del Barcelona Supercomputing Center tuvo lugar en 2005, como «heredero natural» del antiguo European Center for Parallelism of Barcelona. Tras ser apoyado en la convocatoria de proyectos Consolider-Ingenio 2010 con 5 millones de euros, inició una frenética actividad en múltiples frentes, para acercar la supercomputación a los mejores grupos de investigación de toda España.
Hace unos días, los resultados de este proyecto fueron presentados en un acto en la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación. Allí Carmen Vela, acompañada de Mateo Valero, director del Barcelona Supercomputing Center, dieron a conocer el éxito de este centro multidisciplinar.
La colaboración de 21 grupos de investigación ha sido fundamental para lograr los resultados positivos protagonizados por el Mare Nostrum: 350 científicos han conseguido la participación en decenas de proyectos internacionales. En total, los investigadores del Barcelona Supercomputing Center han destinado 437 millones de horas de cálculo en supercomputadores europeos.
El éxito del Barcelona Supercomputing Center no ha sido positivo sólo para la entidad catalana. De su trabajo se han beneficiado múltiples líneas de investigación relacionadas con el desarrollo de fármacos, la modelización del funcionamiento de un corazón, el diseño de parques eólicos o el trazado del mapa más preciso de la Vía Láctea.
La colaboración de la institución pionera en supercomputación con grandes empresas, tales como Repsol, Intel o Iberdrola es una muestra más del atractivo que supone contar con un centro de estas características en nuestro país. Su éxito ha sido fruto de un trabajo multidisciplinar, siempre orientado hacia la transferencia de la tecnología y el conocimiento y la internacionalización.
Por último, la divulgación científica también ha sido uno de los grandes pilares del Barcelona Supercomputing Center. Su modelización del funcionamiento de un corazón y el vídeo que realizaron para dar a conocer este proyecto, fueron galardonados por la National Science Foundation. Esta animación es espectacular, como también elogió la revista Science, y refleja el increíble trabajo del Barcelona Supercomputing Center en los últimos años:
Imágenes | Barcelona Supercomputing Center
