Los vuelos supersónicos comerciales podrían volver en la próxima década gracias a la tecnología de Boom Technologies.
El último vuelo del Concorde fue el 26 de noviembre de 2003. Después de casi tres décadas surcando los cielos desde Londres y París a Nueva York, el primer avión comercial que había superado la barrera del sonido se retiró. Con la excepción del equivalente soviético Tupolev Tu-144, el Concorde es el único avión supersónico civil hasta la fecha. A día de hoy sigue cautivando la imaginación de los aficionados a la aeronáutica. Y es que aún no ha habido ningún otro que ocupe su lugar.
Al menos hasta la fecha. Pues el proyecto de Boom Technologies quiere rehabilitar la velocidad supersónica como un recurso para la aviación civil. La startup de Denver tiene previsto construir un avión que supere la barrera del sonido; estará listo en los 2020.
El proyecto cuenta con que los avances tecnológicos permitan reducir los costes operativos de los vuelos. Precisamente este aspecto fue uno de los motivos por los que se retiró el Concorde. No eran vuelos rentables sino más bien un elemento de prestigio para las aerolíneas que lo operaban, British Airways y Air France. Pero desde que en el año 2000 murieran 113 personas por un problema en el despegue, el avión que nunca había tenido un accidente dejó de tener este título.
Boom Technologies dice que podría reducir los costes de operación hasta el punto de poder ofrecer tarifas mucho más baratas. Los precios se rebajarían hasta lo que cuesta un billete de clase business hoy en un vuelo regular. Mucho más barato que los más de 10.000 dólares que costaba un billete de ida y vuelta en el Concorde durante los años 90. De momento los precios de salida previstos están en 5.000 dólares para un vuelo de ida y vuelta.
La velocidad del futuro avión de Boom Technologies llegará al Mach 2,2, más del doble que la velocidad del sonido y 2,6 veces la de un avión convencional. El Concorde volaba a un Mach 2,02 en modo crucero. El histórico avión tardaba unas tres horas y media en volar desde Londres a Nueva York. El nuevo proyecto pretende hacerlo en tres horas y cuarto.
La compañía trabaja con proveedores de prestigio, como General Electric y Honeywell para dar forma a su proyecto. Si todo va bien para la próxima década volverá a haber aviones supersónicos civiles. De hecho, el de Boom Technologies no es el único proyecto. El futurista proyecto de Reaction Engines estudia el modo de alcanzar el Mach 5, mientras que Airbus también trabaja en la velocidad supersónica.
Imágenes: Falcon_33 y Boom Technologies
