El arquitecto Luis Alonso Pastor ha sido premiado por el MIT por su innovador sistema de construcción de fachadas de 3,5 centímetros de grosor, en base a un nuevo material y un entramado de cámaras de vacío
Luis Alonso Pastor considera que la esencia de la construcción ha avanzado muy poco desde los romanos. «Dos mil años después, seguimos utilizando los mismos materiales, a excepción del acero”, explica. Esta idea le acompañó a lo largo de sus estudios de arquitectura y ha derivado en la creación de un nuevo sistema para la construcción de paredes.
El modelo que ha creado Luis Alonso Pastor, llamado F2TE3, consiste en la combinación de un nuevo tipo de material y un sistema basado en la creación de cámaras de vacío. En cuanto a su composición, se trata de un aerogel monolítico -compuesto por sílice- al que ha logrado extraer el aire de los poros, creando un entramado de cámaras de vacío que aumenta sus propiedades de aislamiento.
Con este tipo de construcción el grosor de las fachadas se vería reducida a unos tres centímetros y medio, ofreciendo un aislamiento igual al de un muro convencional que tuviera una anchura de unos treinta centímetros, con el consiguiente aprovechamiento del espacio. Otra de sus ventajas es que cumple con el objetivo marcado en el Plan Europa 2020 de reducción de los consumos de energía (requisito que no cumplen la mayoría de los edificios, cerca del 90%).
Este modelo permite además replantear la iluminación de los espacios, ya que las placas de aerogel que componen las fachadas pueden gestionar el paso de la radiación ultravioleta e infrarroja, por lo que pueden levantarse paredes transparentes, traslúcidas u opacas, en función de las necesidades de cada proyecto.
Luis Alonso Pastor ha sido premiado por el MIT como uno de los menores de 35 años más innovadores del año, galardón que le fue entregado el pasado 6 de noviembre en Valencia, en la conferencia emTech España organizada por MIT Technology Review.
Si se le puede poner algún pero a este innovador modelo, es que ningún edificio superior a una planta podría construirse completamente en base a él, aunque sí podría convertirse en una «nueva piel» para construcciones convencionales.
El proyecto ya ha sido patentado en España y mientras Pastor espera a que se tramite la patente internacional, ha comenzado la producción preindustrial del material en colaboración con la empresa francesa Separex.
Imágenes | El Confidencial