El copyright es un tipo de propiedad intelectual que otorga al propietario el derecho exclusivo de hacer copias de su obra creativa. Ya sea artística, literaria, dramática, musical o de otro tipo, el creador o autor tiene los derechos comerciales exclusivos sobre la obra.
Ahora bien, ¿qué pasa cuando la inteligencia artificial (IA) genera obras artísticas o innovadoras? ¿A quién le pertenecen los derechos? La intervención de la IA en la creación de trabajos artísticos plantea ciertas preocupaciones en el campo de los derechos de autor.
¿Qué es la inteligencia artificial?
En términos generales, la inteligencia artificial implica el uso de ordenadores. A través de estas, se logra emular la forma en que el cerebro humano realiza ciertos cálculos.
Un área de la IA, comúnmente conocida como aprendizaje automático mediante redes neuronales, supone la extrapolación de patrones. En consecuencia, se procesan grandes cantidades de información para convertirlas en datos de salida.
Con el tiempo, el programa de IA refina su algoritmo subyacente. Esto da como resultado datos de salida de calidad cada vez más alta. Este proceso se conoce como entrenamiento de una red neuronal.
Inteligencia artificial y copyright
¿Qué pasaría si alguien creara un bot para escribir un guion después de revisar 1000 horas de comedias románticas? ¿Ese guion podría tratarse bajo los lineamientos de copyright? Para despejar esa duda, debemos comprobar el origen y el resultado de la tarea encargada a la inteligencia artificial.
La infracción al copyright puede ocurrir cuando el diseño o texto producido por IA resulta sustancialmente similar a un material protegido por derechos de autor. Si este se utiliza como datos de entrada en el proceso de aprendizaje automático, es probable que el resultado se asemeje demasiado.
En consecuencia, una forma de prevenir esta falta es evitar el uso no autorizado de materiales protegidos.
Zarya of the Dawn y el revuelo por copyright
Nueva York es la primera ciudad que otorga copyright a una obra de arte realizada con inteligencia artificial. Esta hazaña le corresponde a la artista neoyorquina Kris Kashtanova.
El registro, que entró en vigor el 15 de septiembre del 2022, aplica para una tira de cómics titulada Zarya of the Dawn. Kashtanova creó esta obra de arte para la saga Zarya, ayudada por una IA: Midjourney, un servicio comercial de imágenes generadas por IA.
Kashtanova presentó la grabación anunciando que su obra fue asistida y no generada totalmente por IA. También señaló que fue ella quien dio origen a la historia del cómic. Asimismo, se encargó de planificar el diseño y tomó decisiones artísticas para unir las imágenes.
La artista, además, se refirió al proceso que siguió ante la oficina de registros para obtener el copyright de su obra. “Traté de argumentar que tenemos derechos de autor cuando hacemos algo utilizando IA. Lo registré como una obra de arte visual. Hoy mi certificado está en el correo junto con el número y una confirmación de que fue aprobado”, señaló Kashtanova.
Ahora bien, lo anecdótico del asunto es que la idea de registrar la obra provino de una amiga abogada.
¿Qué sucederá con otras creaciones de inteligencia artificial?
A pesar de los conceptos erróneos que circulan, la Oficina de Derechos de Autor de EE. UU. no prohíbe el copyright para obras generadas por IA. Aunque sí descartó el registro de una IA como autor en lugar de un ser humano.
Por otro lado, es probable que algunos artistas hayan registrado obras creadas por máquinas o algoritmos antes. Esta es una teoría verosímil, según Tate Museum, porque la historia del arte generativo se remonta a la década de 1960.
Mientras tanto, la generación de imágenes y contenidos por estos medios gana detractores y partidarios por igual. Artistas y fotógrafos, principalmente, comienzan a considerar la IA como una herramienta útil.
Sin embargo, la venta de estas obras en sitios web de stock de fotos tradicionales puede convertirse en un problema. De momento, casas de imágenes, como Getty Images, rechazan este tipo de material.
Como imaginarás, todavía vienen serias discusiones con respecto al copyright en IA. Hasta entonces, puedes seguir experimentando los sorprendentes resultados que se alcanzan con estas herramientas.
Imagen de Unsplash.
