La supercomputadora IBM Watson se empezará a usar en 14 centros médicos de Estados Unidos y Canadá para personalizar tratamientos contra el cáncer.
En la lucha contra el cáncer cada vez tiene mayor importancia asociar el tratamiento con la huella genética del tumor. De esta forma se mejoran los resultados, pero para esto los médicos necesitan semanas, durante las que tratan de identificar cuál es la mejor medicación para atacar la mutación que está causando el cáncer. Sin embargo, el sistema de computación cognitiva IBM Watson emplea en esta tarea unos pocos minutos.
La supercomputadora de IBM rebusca en su enorme base de datos, repleta de papers científicos, textos de todo tipo y ensayos clínicos sobre diferentes cánceres y sus tratamientos potenciales, con el fin de encontrar la terapia más adecuada en cada caso. El ahorro de tiempo podría resultar providencial, con lo que 14 centros médicos (en Estados Unidos y Canadá) especializados en el tratamiento del cáncer han llegado a un acuerdo para utilizar Watson.
Los centros médicos comenzarán a usar la versión cloud del sistema a finales de 2015, según comentó el presidente de IBM Watson Health Steve Harvey. Lo harán mediante un modelo de suscripción, pagando a la compañía por el servicio. El objetivo es ofrecer a los pacientes tratamientos personalizados a fin de incrementar al máximo las posibilidades de curación.
Para concluir qué tratamiento es el adecuado para cada caso, los oncólogos tienen que introducir en el sistema la huella genética del tumor, los datos claves para saber qué genes han mutado, pues posiblemente estos sean los causantes del cáncer. A partir de ahí Watson hace su investigación y propone soluciones a los médicos.
La propuesta de Watson no es cerrada. El pasado año, cuando IBM anunció un acuerdo con el New York Genome Center, la compañía señalaba que su sistema plantearía varias sugerencias a los médicos, ofreciendo su propia valoración de cada una, pero dejando la última decisión en manos oncólogo. Cada propuesta de tratamiento estará debidamente documentada y argumentada.
Los científicos directamente implicados con Watson no hacen grandes promesas. De hecho no se sabe hasta qué punto será eficaz el análisis de la supercomputadora en muchos pacientes con cánceres comunes, donde la quimioterapia y la radiación seguirán siendo el tratamiento adecuado. Sin embargo, desde el Cancer Genomics, de la Universidad de Washington, apuntan que Watson es una oportunidad para luchar contra el pesimismo que impera habitualmente en torno al cáncer.
Imágenes: IBM