Paul Allen, cofundador de Microsoft junto a Bill Gates, ha mostrado Stratolaunch, el avión más grande del mundo. Se utilizará para enviar cohetes y satélites al espacio.
Paul Allen, además de fundar Microsoft junto a su amigo Bill Gates, tiene una larga trayectoria de inversiones fuera de la compañía, gracias al capital acumulado con la venta de millones de acciones. Su último hito, es Stratolaunch Systems, una compañía fundada en 2011 con la que pretende transportar cohetes hacia el espacio y una vez ahí continúen su trayecto de manera autónoma. La peculiaridad de Stratolaunch, el avión encargado del proceso, es que no sólo es gigantesco, sino que es el más grande nunca construido.
Cuenta con 117 metros de envergadura, lo que le hace el más grande según esa métrica. Cuando no carga con el cohete, pesa 227 toneladas, pero puede moverse con un peso total de 600 toneladas. Cuanta con 28 ruedas y está potenciado por seis motores de uno de los aviones más míticos de todos los tiempos, el Boeing 747, que pese haber entrado en producción en 1969, sigue siendo construido a día de hoy, tras 1529 unidades.
Volviendo a Stratolaunch, podrá cumplir su cometido hasta 10,6 kilómetros de altura, es decir, que no podrá salir o se quedará en el límite de la capa atmosférica más baja, la troposfera. Para despegar necesitará una pista con una longitud de 3,6 kilómetros, prácticamente el doble que lo que requiere un avión comercial convencional.
El sentido de la existencia de una compañía como Stratolaunch Systems se encuentra, como siempre, en la cuestión de los costes. Tal y como se lanzan ahora los cohetes y los satélites, desde plataformas de las que salen autopropulsados, los costes son muy elevados, mientras que con el sistema que propone Paul Allen, pese a que la fuerza necesaria y por tanto el consumo de combustible también es alto, las compañías pueden ahorrar grandes cantidades de dinero.
Stratolaunch Systems ha llegó en octubre a un acuerdo con Orbital ATK, una compañía que envía satélites pequeños con el cohete Pegasus XL. Sin embargo, dado que el nuevo avión está en fase de pruebas, todavía pasará bastante tiempo hasta que pueda llevarlos a órbita. En cualquier caso, tras Elon Musk, Jeff Bezos y Paul Allen, parece que la aeronáutica es uno de los campos a los que más atención están prestando los ejecutivos de grandes tecnológicas.
Imágenes: Stratolaunch Systems