Tras el iris y la huella dactilar, el reconocimiento de oído mediante auriculares puede ser el próximo gran paso en seguridad móvil.
A lo largo de los años, tener un buen nivel de seguridad en el smartphone ha pasado de ser el proceso más tedioso del mundo a algo completamente invisible y muy cómodo. Lo mejor de los sistemas nuevos (no son infalibles, hay que aclarar) es que saben que somos notros quienes estamos desbloqueando el dispositivo gracias a la biometría, la información suele guardarse encriptada, y aunque con la facilidad que se ha promovido pueda parecer que hemos ganado agilidad, pero perdido seguridad, todo lo contrario. Sin embargo, todavía queda mucho que hacer más allá de la huella dactilar o el iris.
El cuerpo humano es muy amplio y hay muchas variables que nos diferencian del resto de seres humanos, pero no parece que más allá de experimentos de desbloqueo como con el pulso cardíaco se puedan extender a muchos más lugares. Sin embargo, en NEC y en la Universidad de Nagaoka han investigado y encontrado otro de esos campos a explorar, el reconocimiento de oído. Y es que nuestro canal auditivo es único y el eco que en el se podruce también, lo que abre la puerta a inventos y patentes como este.
Con un auricular que además de membrana tiene también micrófono incorporado, se emitiría la onda, que circula y produce ese eco único. Si concuerda con el que estaba registrado, el terminal se desbloquearía. A priori se puede pensar que no es del todo necesario salir de las soluciones actuales, pero es que tampoco son perfectas. La huella requiere tener el móvil al alcance de la mano, y el escáner de iris depende de, obviamente, tener el terminal justo delante, pero también de que haya luz suficiente, porque por mucho que hayan mejorado las lentes, aún queda para poder reconocer en muy baja luz.
Lo interesante del reconocimiento de oído sería que siempre que tengamos los auriculares puestos, no habrá problema alguno en expandir de manera activa sus capacidades. Por ejemplo, que ciertas aplicaciones sólo estén abiertas mientras nuestro oído este siendo detectado. A diferencia de los otros métodos, podría funcionar incluso cuando llevemos el terminal en el bolsillo. El punto negativo que le vemos, es, a simple vista, que serían auriculares exclusivos.
La tecnología detrás del reconocimiento de oído aún está en proceso de desarrollo. Esperan poder comercializarla a ensambladores partir de 2018, y que en los meses posteriores comience su expansión a terminales comerciales.
Imágenes: Stock Up y NEC.