El headset AlterEgo, creado por MIT MediaLab, puede leer las palabras que piensa cualquiera que lo lleva con hasta un 92% de precisión.
Un equipo del MIT Media Lab ha sido el responsable de crear un dispositivo sorprendente. Se trata de un sofisticado headset, un auricular para el oído que llega hasta la mandíbula, capaz de leer los pensamientos del usuario que lo lleva.
Se puede decir que este headset es sofisticado por su funcionamiento. Pero lo cierto es que la primera impresión que salta la vista no invita a usar ese calificativo. Físicamente el dispositivo es una cubierta blanca que se acopla a la oreja por encima, en forma de gancho, y desciende en curva recorriendo el lateral de la mandíbula hasta la barbilla del usuario. No parece, desde luego, el culmen de la sofisticación.
Sin embargo, el dispositivo creado por el MIT ha dado con un método para leer los pensamientos de una persona. Y lo ha hecho dando un rodeo con una brillante idea. Habitualmente las interfaces cerebrales tratan de descifrar los comandos del cerebro analizando las señales neuronales. Esto, además de necesitar una proeza técnica, requiere probablemente mayor conocimiento del cerebro humano para aumentar la precisión.
El headset AlterEgo, que así se llama este dispositivo, funciona en base a la conducción ósea. Cuando un usuario piensa una frase en su cabeza, su cerebro envía señales a su boca y a su mandíbula. Estas señales son las que lee el dispositivo. Pero aún hay más, pues la comunicación puede ser bidireccional. Una vez conocido el código de estas señales, el headset puede enviar frases de vuelta al usuario.
Por todo esto, el aspecto físico importa poco. Además, el dispositivo es un prototipo, así que su aparatosidad se le perdona.
Un complemento para el smartphone
Sus creadores piensan que AlterEgo puede convertirse en una herramienta inestimable para complementar el smartphone. Lo dicen porque la desventaja de los teléfonos inteligentes es que necesitan de la atención del más sensible de nuestros sentidos, la vista.
Con un dispositivo como AlterEgo, un usuario tendría todas las ventajas de un asistente inteligente, pero sin hablar. Y, lo que es casi más importante, la información de vuelta se envía silenciosamente, sin que nadie más la escuche. En el vídeo explicativo del MIT se ve cómo la persona que lleva el headset pregunta por el tiempo. La respuesta llega en silencio, solo oída por el usuario. En un supermercado, el protagonista del vídeo piensa los precios de los productos que comprará e inmediatamente conoce el total.
Imagen: ColiN00B
