La búsqueda de planetas habitables es una constante en la exploración espacial. Los nuevos resultados de Kepler han identificado a los dos planetas más similares a la Tierra hasta el momento.
En 2011 se estrenaba en los cines la película Another Earth, que planteaba un interesante debate filosófico. ¿Qué ocurriría si encontráramos un planeta similar al nuestro? Aunque su argumento se basa en la ciencia ficción, lo cierto es que la búsqueda de exoplanetas habitables ha sido una constante en la investigación espacial. Los nuevos resultados de la misión Kepler nos acercan a ese gran reto: descubrir un mundo en el que se den las condiciones adecuadas para la vida, y tal vez, hallar los primeros organismos vivos extraterrestres.
El satélite Kepler, que debe su nombre al astrónomo y matemático Johannes Kepler, orbitaba alrededor del Sol desde finales de 2012, hasta que por problemas técnicos tuvo que suspender sus operaciones de búsqueda en mayo de 2013. A pesar del parón de la misión, seguimos analizando los resultados obtenidos por este peculiar observatorio, y su trabajo ha permitido que nuestra visión del Universo cambie por completo.
Los últimos hallazgos, dentro del programa Discovery de la NASA, han identificado dos planetas muy similares a la Tierra. Como explican a la Agencia SINC, los científicos han descrito estos nuevos exoplanetas como «candidatos prometedores» en la búsqueda de vida. Sin duda, son una muestra del éxito rotundo de Kepler y de la NASA.
La distancia, ese gran problema
Y es que encontrar algún tipo de organismo vivo más allá de los confines de la Tierra es un sueño que ha trascendido de la ciencia ficción. Los resultados de Kepler permiten saber más acerca de los exoplanetas más similares a la Tierra identificados hasta el momento. Se trata de Kepler-438b y Kepler-442b, localizados a 470 y 1.100 años luz de nuestro planeta.
Estos mundos se encuentran en Goldilocks, una zona caracterizada como de «habitabilidad estelar». Dado que su distancia a una estrella es óptima, los planetas ahora descubiertos por Kepler podrían incluso albergar agua líquida. En otras palabras, si estos exoplanetas recibieran más luz de la cuenta, el agua contenida herviría, mientras que si apenas recibieran luz, los restos de agua podrían congelarse.
¿Cuál es el reto que afronta ahora la exploración espacial? Al igual que en otros hallazgos realizados por Kepler, los exoplanetas descubiertos están tan distantes que las observaciones y análisis posteriores son realmente complejos. Estos retos, sin embargo, no deben quitar mérito al gran trabajo desempeñado por esta misión de la NASA.
Hasta el momento, Kepler ha detectado 1.000 exoplanetas en 440 sistemas estelares. Su labor también ha ayudado a observar cerca de 3.300 candidatos a planetas aún no confirmados. En definitiva, Kepler ha escrito uno de los capítulos más exitosos en la historia de la NASA. La misión llegó a su fin, pero la búsqueda de vida continúa.
Imágenes | David A. Aguilar (CFA)