Los juguetes digitales de Lego están basados en los productos físicos de la marca, a partir de los cuales los niños (y mayores) desarrollan construcciones digitales.
Una de las principales preocupaciones de las marcas jugueteras hoy en día es atraer la atención de los niños por encima de los smartphones y las tabletas. El magnetismo de estos dispositivos, con una cantidad de juegos tan amplia que abarca todas las edades, no sólo está restando cuota de mercado a las videoconsolas. Los juguetes más tradicionales también se están viendo afectados por la omnipresencia del mundo digital y sus fabricantes necesitan innovar para seguir en la cresta de la ola. Lego es un buen ejemplo de la renovación que está buscando este sector.
El éxito de ‘La Lego película’, que arrasó en la taquilla de Estados Unidos e incluso recibió una casi unanimidad de críticas positivas, ha servido para que el nombre de la conocida marca danesa de juguetes vuelva a estar en la mente de muchos. Este esfuerzo de promoción estará acompañado del lanzamiento de una nueva línea de productos, bautizada como The Lego Fusion.
El nombre resume con precisión la esencia de estos nuevos juguetes. Los niños tendrán que armar pieza a pieza sus construcciones, hasta aquí no cambia nada. Pero una vez estén construidas, las estructuras se colocan en una plataforma y se hace una foto de ellas con un smartphone o tableta (sirven dispositivos iOS y Android). De esta forma la creación física se importa al mundo digital y en torno a ella se crea un juego descargable gratuito.
Se trata, por así decirlo, de traer a la vida las estructuras físicas construidas con tanto esfuerzo. Uno de los juegos surgirá a partir de fachadas de casas, que en el plano digital se transformarán en una pequeña ciudad habitada por figuras de Lego, mientras que en otro la construcción de una torre medieval se convertirá en una aventura para defender la creación de monstruos voladores.
Es una forma de continuar la diversión en el mundo digital una vez que el mayor reto que ofrece Lego en el mundo físico ha concluido. Los juguetes digitales de Lego se empezarán a vender a partir de agosto en Estados Unidos, Las cajas costarán 35 dólares y vendrán con 200 piezas y una plataforma especial donde montarlas. Por el momento solo aparecerán en el país norteamericano, un mercado grande y propicio para probar una apuesta de este estilo.
La idea es capturar la atención de los niños, no ya para que éstos no se desvíen hacia los juegos en smartphones y tabletas (esto ya se da por hecho), sino para que la marca se logre hacer un hueco en este mercado y puentee directamente con su negocio tradicional, la venta de piezas físicas.
Los juguetes digitales de Lego no son la única estrategia rompedora en la industria juguetera. Hace unos meses el gigante Hasbro llegó a un acuerdo con 3D Systems para que algunos de sus productos pudieran imprimirse en 3D desde casa, mientras que cada vez abundan más los juegos destinados a enseñar a programar a los más pequeños.
Imágenes: Lego y Paul of Congleton