softwarización y movimiento al cloud

Cuatro palancas tecnológicas para construir la red del futuro: la softwarización y el movimiento al cloud

La softwarización se ha consolidado en los últimos años como una tecnología imprescindible en nuestras redes. En la actualidad ya es usada para planificar nuevos servicios y tiene una influencia esencial en tecnologías como 5G, fundamentalmente en su Core, en Open RAN, en el Telco Edge y en un nuevo concepto que ha dado en llamarse “el continuum” consistente en gestionar de manera uniforme la red, los dispositivos y el cloud.

Las funciones de red se transforman en software que corre sobre infraestructuras uniformes y se gestionan aplicando principios similares a los usados en el cloud para gestionar las aplicaciones IT. Todo ello implica más flexibilidad y servicios y funciones más ágiles que pueden responder mejor a las variaciones de la demanda.

Infraestructura híbrida multi-cloud

La red y los sistemas se van a apoyar en una infraestructura híbrida multi-cloud distribuida que alojará y ejecutará las cargas de IT y las funciones de red basadas en software.

infraestructura hibrida multi cloud

Esto significa que seremos capaces, en función del tipo de servicio que queramos prestar y a quién, de seleccionar dinámica y automáticamente en qué tipo de cloud queremos que se desplieguen las funciones con soluciones particularizadas.

Por ejemplo, si queremos desplegar un servicio rápidamente, de baja latencia, como juegos on-line, nos acercaremos todo lo que podamos al cliente y desplegaremos en lo que llamamos Edge. Para otro tipo de servicios elegiremos el cloud donde desplegar en función de la eficiencia y rendimiento que se necesite, la criticidad de las funciones, requisitos de privacidad, normativos o estratégicos.

Seremos capaces de seleccionar dinámica y automáticamente en qué tipo de cloud queremos que se desplieguen las funciones con soluciones particularizadas.

Lo importante es que con el enfoque multi-cloud seremos capaces de mover las cargas de un sitio a otro, y con el enfoque híbrido podremos utilizar nuestras redes privadas, las de otro proveedor de infraestructura e incluso las de un hyperscaler. Elegiremos lo más conveniente.

Para que todo esto sea posible las funciones de red, que van a ser software portable de una nube a otra, es decir, cloudnative, tienen que permitir esta interoperabilidad. En Sistemas hemos avanzado mucho ya en esta migración al cloud, fundamentalmente en B2B, y vamos a seguir en B2C, al tiempo que se apagará el legado. El reto de los próximos años será la migración al cloud de la red.

¿Y por qué es precisa esta migración al cloud? Porque gracias a la Softwarización de la red y a poder disponer del cloud, y de estas capacidades de computación distribuidas es posible crear red y servicios de forma dinámica y específica para cada necesidad.

Una gran plataforma de computación y conectividad

La red se convierte así en una gran plataforma de computación e, importante, de conectividad que se reconfigura de manera dinámica para dar el servicio final deseado. Para ello se precisa de una gran labor de orquestación extremo a extremo y a todos los niveles de la red y los sistemas, para lo que hay que desacoplar las diferentes capas de manera que cada una pueda evolucionar de forma independiente. Por un lado, los productos finales que damos a nuestros clientes, por otro, los servicios que conforman esos productos y, por debajo, las capacidades, es decir, los recursos que la red y los sistemas ofrecen para crear estos servicios.

Es esencial independizar estas capas, aislar estos planos para que se ofrezca a la capa superior las capacidades de forma independiente y con su propio ciclo de vida gestionado en cada nivel. ¿Por qué? Porque con este diseño se pueden componer productos de mayor complejidad reusando las piezas diseñadas y es posible ofrecer a terceros la posibilidad de incluir esas capacidades en sus propios servicios.

La orquestación de la red basada en la intención, con una visión ascendente de servicio y una descendente de recursos es lo que le da la magia a esta nueva supercomputadora distribuida que será la red. En la evolución hacia las conexiones del futuro, la gestión de los ciclos tecnológicos, la softwarización y el movimiento al cloud, las arquitecturas abiertas y desagregadas y automatización y el uso de inteligencia artificial son cuatro palancas esenciales.

Imagen de cabecera de Envato.

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