Un profesor de la Universidad de Maryland y sus estudiantes han creado RoboSAM, un robot que pide ayuda a los humanos cuando la necesita.
Una de las habilidades de una persona inteligente es su capacidad para pedir ayuda cuando la necesita. Hay muchas carencias aún en los sistemas de inteligencia artificial y esta capacidad es una de ellas. Esto se nota especialmente en los robots que forman las cadenas de producción, cuya tarea es repetitiva. Si uno de ellos encuentra dificultades para desarrollar su trabajo continuará haciéndolo a pesar de todo, lo que podrá llevar a que el resultado no sea el esperado o a que sencillamente se bloquee.
Por circunstancias de este tipo se puede llegar a parar toda una cadena de producción. Un robot que pide ayuda podrían resolver este problema y contribuir a ahorrar en costes a la larga, teniendo en cuenta que cualquier incidencia así en la cadena tiende a magnificarse. El profesor S. K. Gupta, de la Universidad de Maryland, en Washington, y sus estudiantes han desarrollado un robot capaz de reconocer cuándo tiene que pedir ayuda a una persona.
De esta forma se pretende evitar que el robot se quede bloqueado o cumpla mal con su tarea. RoboSAM, que así se llama la máquina, un acrónimo que esconde ‘Robotic Smart Assistant for Manufacturing’) se basa en la plataforma industrial de robótica Baxter, un entorno que no solo está destinado a empresas sino a los laboratorios de instituciones académicas, para experimentación.
RoboSAM estima la probabilidad de que sea capaz de cumplir con una tarea antes de comenzarla. Si calcula que hay pocas posibilidades de que pueda llevarla a cabo pide asistencia humana. Su sistema le permite llamar a una persona para que esta acuda a ayudar a la máquina. Si tiene que recoger con sus pinzas un objeto de una caja, pero este se halla sepultado y es difícil de distinguir, el robot hará la llamada.
Ante la eventualidad la persona acude para indicar a la máquina cómo actuar. El asistente humano estudia el problema y dicta una serie de órdenes a la máquina para que esta lleve a cabo su tarea correctamente. En este caso podría indicar a RoboSAM que primero apartara las otras cosas antes de lanzarse a agarrar la pieza deseada.
Los creadores de RoboSAM opinan que su robot podría contribuir a la mejora del modelo económico que actualmente dirige el despliegue de robots, sobre todo en pequeñas y medianas empresas. En este caso las pérdidas que se pueden producir en una fábrica son más difíciles de soportar para la empresa, por su menor capacidad de producción.
Imagen: Kris Krug