El nuevo informe de la OMM (Organización Meteorológica Mundial) señala los tristes récords que el clima alcanzó en 2019 y en los últimos años.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha publicado su informe anual Statement on the State of the Global Climate para 2019. Los datos que arroja el documento no son positivos. La tendencia que se ha visto en los últimos años continúa. Y no existen visos de que vaya a revertirse. El informe de la OMM señala que la temperatura media de 2019 fue 1,1 grado superior a la época preindustrial.
El mes de julio de 2019 fue el más caluroso de todos los tiempos, desde que existen registros. En lo que respecta al año en su conjunto, fue el segundo más caluroso. El primero sigue siendo 2016. En una mirada más amplia, el informe de la OMM pone a la década del 2010 al 2019 como la más calurosa hasta el momento. Es quizá la consecuencia más visible del cambio climático.
Cabe destacar que desde los años 80 no ha habido una década que sea menos calurosa que la anterior. Es decir, cada nuevo decenio tiene una temperatura media más elevada que su predecesor. Esto hace que el acumulado de temperatura suba peligrosamente.
En lo que respecta a récords menos globales, Australia está en primera línea. El país meridional tuvo su año más seco y caluroso. De ahí el gran número de incendios que asolaron al país en los meses pasados. Su mes más caluroso fue enero y el día en que más subió la temperatura a nivel nacional fue el 18 de diciembre.
La necesidad de poner freno al calentamiento
La ONU ya ha avisado de que en el año 2030, el planeta alcanzará el límite clave de 1,5 grados por encima de la temperatura preindustrial. Este es el ritmo que actualmente se lleva, pero es una coyuntura que se quiere evitar. Y es que las consecuencias de esto serían imprevisibles. El Acuerdo de París ya estableció que las emisiones habían de controlarse para evitar este extremo. El límite está entre ese 1,5 grado y los 2 grados. Todo lo que sobrepase puede resultar desastroso para el planeta.
Para acabar con el cambio climático se han propuesto muchas ideas. Algunas de ellas incluso son planes extravagantes, como el del profesor de Física Aplicada en la Universidad de Harvard David Keith. Él fue quien planteó pulverizar ácido sulfúrico a una altitud de 20 kilóemetros en los trópicos. Con el fin de que el azufre se combine con el vapor de agua transformándose en aerosol de sulfato. Así se generaría una capac que reflejaría un porcentaje de la luz solar. Podría llegar al 1%.
Imágenes: Dassel, marcinjozwiak