Es uno de los conceptos más comentados de lo que va de 2022. Seguramente aún no haya dos concepciones iguales de lo que cada uno imaginamos como metaverso, pero su interés como vía de negocio y posible plataforma de experimentación digital está más que probado.
Aunque no es un concepto ni mucho menos nuevo, desde que en octubre de 2021 Facebook pasara a renombrarse como Meta y pusiera el foco en el metaverso las inversiones de otras muchas empresas no han dejado de crecer. Microsoft, Tecent, Roblox o Nike han empezado ya a trazar sus planes metaversiales, si es que podemos llamarlo así. Y aunque las primeras pruebas que hemos visto como Horizon Wordls, de Meta, no difieren mucho de los que sería algo parecido a Second Life, está claro que el metaverso va a seguir traccionando inversión y atención en los próximos años.
Por dar algunas estimaciones, la firma de análisis StrategyR valora que para 2026 el mercado global del metaverso moverá 758 mil millones de dólares anuales.
Sin embargo, hasta ahora el debate sobre el metaverso parece haberse centrado en cómo algunas empresas se posicionan ante él. ¿Pero, y los estados? Lo cierto es que a nivel gubernamental también se han producido ya acercamientos, algunos con un enfoque más publicitario y otros con un impacto que ya es palpable.
Vamos a hacer un viaje por el mundo (pero el del metaverso) para descubrir cómo algunos gobiernos y estados se están posicionando hacia esta tendencia.
Estados Unidos: algunas ciudades señalan ya aplicaciones palpables
Hasta ahora, podría dividirse las posturas de algunos países y ciudades al metaverso en tres categorías principales: las ciudades que se están basando en gemelos digitales para probar posibles aplicaciones que puedan llegar a sus calles, las que se enfocan en ver cómo la realidad virtual puede ayudar a sus ciudadanos; y, por último, los que se están aupando en el metaverso con fines más bien turísticos o de repercusión.
Y es que no hay que olvidarse por muy obvio que sea que, una de las aplicaciones más evidentes que vienen a la cabeza con el uso de metaversos, es la posibilidad de ‘viajar’ virtualmente a otros territorios.
En Estados Unidos encontramos algunas ciudades que ya están activando el primero de los acercamientos que comentábamos: el uso de gemelos digitales para crear un laboratorio urbano en el metaverso.
Orlando, Boston y Las Vegas han creado réplicas virtuales de sus ciudades, lo que les permite reproducir escenarios hipotéticos para anticipar el impacto específico de posibilidades como la construcción de nuevos edificios, el cambio de calles, de semáforos u otras decisiones de uso del suelo.
Pittsburgh también utilizó estos sistemas para ayudar a desplegar semáforos adaptativos que cambian en función del tráfico real para reducir los tiempos de desplazamiento y el consumo de combustible. Este sistema de tráfico inteligente ha reducido los retrasos en los desplazamientos en la ciudad en un 20% aproximadamente.
Barbados se adelanta en el metaverso
En otro de los casos, el del uso del metaverso con fines turísticos, encontramos a Barbados. El país insular apenas tardó un mes desde el anuncio de Mark Zuckerberg con Meta para, en un movimiento que les llevó a protagonizar titulares en todo el mundo, erigirse como el primer país con una embajada en el metaverso.
¿Cómo? Llegando a un acuerdo con Decentraland, plataforma que propone uno de los muchos mundos virtuales surgidos en estos últimos meses, para tener su propio espacio.
Además, en su comunicado, Barbados afirmaba estar hablando con varias empresas del metaverso para establecer una «tierra soberana digital». «La idea no es elegir un ganador: el metaverso es todavía muy joven y nuevo, y queremos asegurarnos de que lo que construyamos sea transferible a todos los metamundos», dijo el embajador de Barbados en Emiratos Árabes Unidos y uno de los promotores de la idea, el también empresario digital Gabriel Abed.
A medio plazo, se estima que el espacio de Barbados en Decentraland permitirá a sus usuarios comprar terrenos digitales y recorrer la isla de un lado a otro.
Seúl: hacia los servicios y los funcionarios del metaverso
Una aproximación más administrativa es la que ha emprendido Seúl, la capital de Corea del Sur. El gobierno surcoreano ha empezado a invertir 177 millones de dólares en el desarrollo del un metaverso a nivel local durante los próximos cinco años.
El principal objetivo de la inversión es poner en marcha una industria local focalizada en el metaverso, pero, además, a ello se suma una serie de servicios para el ciudadano denominados Metaverse Seoul en la que sus vecinos podrán reunirse mediante realidad virtual con los avatares de los funcionarios de la ciudad. Los ciudadanos también podrán visitar lugares emblemáticos y asistir a eventos en el mundo virtual.
El lanzamiento de Metaverse Seoul forma parte de un plan llamado Seoul Vision 2030 del alcalde de la ciudad, Oh Se-hoon, para construir a la ciudad como una urbe líder en el mercado de las ciudades del futuro y se enmarca en varias fases: la de «introducción» en 2022, la fase de «expansión» en 2023 y 2024 y la de «asentamiento» en 2025 y 2026.
China tampoco se queda atrás
China también cuenta con un plan para situar a Shanghai como punta de lanza de las ciudades del metaverso. Los departamentos gubernamentales chinos y las autoridades locales han publicado este año planes quinquenales de desarrollo y, uno de ellos, contiene la primera mención al metaverso.
El documento aboga por «fomentar la aplicación del metaverso en ámbitos como los servicios públicos, las oficinas comerciales, el entretenimiento social, la fabricación industrial, la seguridad de la producción y los juegos electrónicos”.
La comisión dijo que planea aumentar la investigación y el desarrollo de las tecnologías subyacentes, incluidos los sensores, la interacción en tiempo real y el blockchain. El documento, eso sí, no establece un calendario ni unos objetivos concretos, eso sí.
El último plan quinquenal de Pekín, publicado en marzo, nombraba siete tecnologías «de frontera» en las que China se centraría en su búsqueda de la autosuficiencia en ciencia y tecnología, entre las que estaba el metaverso y gigantes tecnológicos locales, como Baidu, ya han mostrado sus planteamientos.
Pese a esto, y tras la persecución que China ha efectuado sobre otras tecnologías como las criptomonedas, hay voces que creen que el metaverso chino también estará fuertemente regulado. Winston Ma, profesor adjunto de Derecho en la Universidad de Nueva York de origen chino, explicaba hace unos meses en el programa Squawk Box Asia de la CNBC que “es esperable que haya regulaciones sobre las propuestas que pueden ofrecer sobre el metaverso algunas grandes empresas chinas.
Emiratos Árabes Unidos también ha puesto el foco en el metaverso
De China pasamos al Golfo Pérsico, donde este año el jeque Hamdan bin Mohammed bin Rashid Al-Maktoum, príncipe heredero de Dubai y presidente del Consejo Ejecutivo de Dubai, anunció el lanzamiento de una nueva estrategia basada en el metaverso para la ciudad.
El objetivo principal de la estrategia es mejorar la tecnología de la ciudad, crear nuevos trabajos gubernamentales y aplicarlos también al turismo.
En concreto, Emiratos Árabes ha firmado un convenio con la Fundación TMRW, una iniciativa impulsada por el creador de videojuegos de origen alemán Cevat Yerli, para investigar en posibles soluciones aplicadas en el metaverso. Por ejemplo, se quiere que los residentes pueden obtener servicios y consultas a nivel sanitario sin salir de sus casas pero usando realidad aumentada y virtual.
¿Y España?
A nivel español, el metaverso también ha aparecido ya en el ámbito gubernamental. El Gobierno español publicó hace unos meses una convocatoria para promover subvenciones por un total de 3,8 millones de euros enfocadas a pequeñas y medianas empresas que se dediquen a iniciativas de investigación, desarrollo e innovación relacionadas con las tecnologías Web3 y del metaverso.
Las ayudas se enmarcan dentro de un paquete más grande denominado ‘España, centro audiovisual de Europa’, que a su vez forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En particular, la convocatoria remarca que se buscan impulsar el “desarrollo de nuevos espacios de trabajo en línea para la cooperación» y los “nuevos procedimientos o modelos que apliquen la tecnología para el metaverso en entornos relacionados con la cultura, la salud o la educación”.
Como ha ocurrido a lo largo de los últimos meses, todos los mensajes en torno al metaverso siguen siendo poco concretos. También, los que hemos conocido por parte de los estados. Esto o evita que el interés creciente haga que en unos años, de una forma u otra, todos seamos testigos de si muchas de estas propuestas son solo un brindis al sol o toma forma mediante algo más que avatares con formas simpáticas, para tener un impacto real en nuestras ciudades y estados.
Imagen de portada: Nicotxan