Microsoft se ha aliado con Intel y el fabricante de hardware CircuitCo para crear su propia alternativa a Raspberry Pi, llamada Sharks Cove, ideada para desarrolladores de software y hardware dedicados al ecosistema Windows y Android.
Cuando la fundación Raspberry Pi lanzó su mini-ordenador que lleva el mismo nombre, tenía la ambición de llevar esa maravillosa ciencia llamada computación a todos los rincones del mundo, con un ordenador que, aunque esté compuesto por los componentes más básicos, sea suficiente para disparar la adopción de la informática en la mayoría de escuelas y rincones del mundo por el menor precio.
Raspberry Pi nació con un precio ridículamente bajo, de apenas 35 dólares por unidad, y la idea fue adoptada con gran emoción, eso sí, en muchos más lugares que solamente el sector educativo, dado que se ganó instantáneamente a desarrolladores y entusiastas de la informática.
Es normal que muchos hayan seguido los pasos de Arduino y Raspberry Pi, por lo que comenzaron a aparecer algunas alternativas interesantes al mini-ordenador de los 35 dólares, de diferentes marcas y compañías. Microsoft también ha decidido, un par de años más tarde de Raspberry Pi, lanzar su propia alternativa, aunque difiera bastante en cuanto a hardware y precio.
Sharks Cove es el mini-ordenador de placa única diseñado por Microsoft, en conjunto con el fabricante CircuitsCo e Intel (curioso, dado que estos últimos tienen su propia alternativa a Pi). Su hardware es mucho más potente que el de Pi, pero por ende, también es mucho más costoso.
Según anuncia Microsoft, Sharks Cove está diseñada para aquellos desarrolladores y programadores más exigentes que vayan a crear tanto hardware como software para Windows y Android, y por ello han incluido componentes superiores a los de Raspberry Pi y cualquiera de sus alternativas.
Comenzando con su procesador, Sharks Cove incorpora un Intel Atom Z3735G de cuatro núcleos, con frecuencia a 1.33 GHz, que trabajará acompañado de 1 GB de memoria RAM, gráficas integradas Intel HD y una capacidad de almacenamiento base de 16 GB, que podrá ser expandido a través de una ranura microSD (al igual que en los otros micro-ordenadores). Cuenta con conexión a Internet únicamente a través de un puerto Ethernet y diferentes puertos básicos de conexión, incluyendo USB, Jack de 3.5mm para altavoces y HDMI para un monitor.
Algo muy interesante de este mini-ordenador de Microsoft es que también incluye una licencia del sistema operativo Windows 8.1, por lo que en teoría está preparado para, de una vez, ofrecer a los desarrolladores todo lo necesario para trabajar sobre interfaces como GPIO, I2C, UART, SDIO, USB y MIPI.
El precio de Sharks Cove es de 300 dólares y ya está disponible; nuevamente, un costo bastante elevado si lo comparamos con Raspberry Pi o cualquiera de sus alternativas. Pero se debe recordar que este no es un ordenador de placa única dirigido a las masas, a las escuelas y a evangelizar las ciencias informáticas y el interés por la programación, como lo es Pi. No, en el caso de Sharks Cove es un mini-PC dirigido a otro tipo de masas, la de los desarrolladores, y luce como una alternativa bastante interesante y con potencial para la creación de nuevo hardware, aplicaciones y controladores para Windows y Android.
