cancer

Un simple smartphone ayudaría a detectar casos de cáncer en el tercer mundo

La mHealth aspira a ser una gran aliada en los países del tercer mundo. Un nuevo dispositivo fabricado por científicos de la Universidad de Cornell detecta algunos tipos de cáncer de manera más rápida y barata.

Uno de los grandes problemas sanitarios de los países del tercer mundo es que no cuentan con sistemas de diagnóstico precoz de enfermedades. Esta gran desventaja hace que los pacientes no puedan ser tratados en el momento que comienzan a sufrir una determinada condición patológica. En el caso del cáncer, este problema se agrava, puesto que cuanto antes se iniciara la administración de una terapia en estos individuos, mejor podrían responder a los tratamientos.

La utilización de la mHealth, sin embargo, podría cambiar en buena medida los sistemas de diagnóstico precoz de algunos tipos de cáncer. En particular, científicos de la Universidad de Cornell han estudiado un dispositivo construido a partir de un smartphone, que ayudaría a diagnosticar casos de pacientes afectados con sarcoma de Kaposi.

Este tipo de cáncer forma lesiones malignas en la piel, las membranas mucosas, los ganglios linfáticos y otros órganos. Con el dispositivo inventado por los científicos norteamericanos, se podría diagnosticar fácilmente este tipo de neoplasia maligna, disminuyendo considerablemente los tiempos de espera y los costes económicos asociados al diagnóstico del cáncer.

cáncer

El sistema, que cuesta algo menos de 500 dólares, es bastante sencillo. Cuenta con el propio smartphone, una aplicación móvil, unas lentes y un diminuto chip, que permiten detectar si los pacientes están afectados por este tipo de cáncer. El dispositivo funciona empleando nanopartículas de oro que son capaces de unirse a muestras de ADN viral, en el caso de que las personas sufran sarcoma de Kaposi.

Si la reacción química se produce, las partículas se combinan de manera conjunta y dejan de pasar menos luz de la habitual por el dispositivo, provocando un cambio de color que es visible a simple vista. Un sensor óptico acoplado al smartphone puede «medir» ese cambio cromático para mostrar la severidad de la infección vírica que produce a la larga este tipo de cáncer.

El primer prototipo fue probado el año pasado en Uganda y Kenia, y dados los buenos resultados obtenidos, se prevé que pueda distribuirse en otras regiones del tercer mundo. Su bajo coste, asociado a la reducción de la energía que necesita para funcionar (alrededor de 100 veces menos que los métodos tradicionales, al estar alimentado por energía solar), convierten a este dispositivo en un candidato adecuado para mejorar la salud en estos países.

Imágenes | Wellcome Images (Flickr)

RELACIONADOS