supercristal SLIPS

Así es el supercristal SLIPS, fabricado a partir de una planta carnívora

La inspiración para construir nuevos materiales puede encontrarse en cualquier lugar, también en la naturaleza. Ahora ingenieros de Harvard han desarrollado un supercristal a partir de una planta carnívora.

Las plantas carnívoras son unos de los seres vivos más fascinantes y aterradores, según se mire. En 1875, el mismísimo Charles Darwin escribió el primer tratado sobre este tipo de plantas, que basan su nutrición principalmente en insectos. Aunque dependiendo del mecanismo de captura que usen (bien «en pinza», bien mediante los conocidos «pelos pegajosos»), tenemos un tipo u otro de planta carnívora, lo cierto es que resultan muy interesantes, no sólo desde el punto de vista de la biología, sino también para todos los aficionados a su cultivo.

Y como ya os comentamos anteriormente, los seres humanos no paramos de fijarnos en la naturaleza para aprender y poder fabricar nuevos materiales. Gracias a los conocimientos sobre los organismos vivos, y a la observación del medio que nos rodea, hemos sido capaces, por ejemplo, de crear seda de araña fuerte y flexible a partir de cabras modificadas genéticamente.

La ciencia e ingeniería de materiales se basa en la bioinspiración para producir nuevos avances tecnológicos. El último de estos inventos, basado en el estudio de una planta carnívora, nos lo brinda el Wyss Institute, perteneciente a la Universidad de Harvard. Su trabajo ha permitido la construcción de la superficie SLIPS, un novedoso material barato, robusto y sencillo, capaz de repeler una gran variedad de sólidos y líquidos.

supercristal SLIPS

El supercristal SLIPS puede tener una gran diversidad de usos, que van desde el desarrollo de novedosos dispositivos biomédicos a la creación de nuevos materiales para la arquitectura o el transporte de combustible. Y es que este nuevo material presenta unas características únicas, inspiradas en la planta carnívora de la especie Nepenthes, que vemos en la fotografía superior.

El uso de esta nueva superficie para fabricar el supercristal SLIPS, denominado así ya que su nombre en inglés es Slippery Liquid-Infused Porous Surfaces, es de suma importancia, puesto que hasta la fecha sería el material más resbaladizo conocido en la industria. No sólo eso, sino que además al conservar las propiedades de cualquier ‘vidrio’, como la transparencia y la dureza, la industria se beneficiaría de sus múltiples beneficios.

El trabajo sobre este supercristal SLIPS ha sido difundido a través de la revista Nature Communications.  Un estudio en el que se demuestran muchas de sus propiedades, como la de repeler el agua y disoluciones acuosas, o líquidos de viscosidad parecida a la miel. Además, uno de sus puntos clave es que es capaz de resistir la formación de hielo y de biopelículas bacterianas, lo que hace que este supercristal SLIPS pueda ser considerado como un buen candidato para construir novedosos dispositivos biomédicos.

Como vemos, la bioinspiración está dando potentes resultados en los últimos años para construir nuevos materiales, de los que pronto nos beneficiaremos. ¿Quién nos iba a decir que una planta carnívora podría impulsar el desarrollo de la medicina o incluso de la construcción?

Imágenes | Harvard University, Wikipedia

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