“Todo cambio (no solo tecnológico) basado en el conocimiento (no solo científico) que aporte valor (no solo económico)”. De esta forma define la innovación Cristina Garmendia, presidenta de la Fundación COTEC para innovación. Y precisamente sobre eso vamos a hablar a continuación, porque, como asegura Garmendia, “todos podemos innovar”.
La sociedad está en continuo cambio y adaptarse es el único camino de éxito. El valor de la transformación se contagia a los distintos ámbitos sociales y profesionales, donde la digitalización se ha ido imponiendo en todos los campos. Y aquí es donde entra en juego, inevitablemente, la innovación. Una innovación abierta que debe combinar ideas internas y externas en arquitecturas, sistemas y nuevos formatos que obedecen a un modelo de negocio que, en sí mismo, contiene una disrupción, al menos, en algunas de sus formas. La innovación es también una cuestión de velocidad, de adaptación, de visión y de capacidades digitales. Elementos fundamentales para impulsar la transformación que demandan las estructuras socioeconómicas actuales.
Y en línea con este discurso, y como ejemplo de innovación abierta en el sentido de la definición arriba planteada, vamos a hablar de Talentum LABs de Telefónica. Se trata de “garajes de innovación” que aúnan equipos multidisciplinares de jóvenes profesionales que, trabajando junto con mentores seniors, la tecnología más avanzada y una metodología propia, resuelven una serie de retos de transformación digital en un periodo temporal puntual (normalmente, seis meses).
Una combinación perfecta
Una fórmula mágica que “engancha” e inspira no solo a los jóvenes y mentores que se sumergen en la experiencia, sino también a las compañías que apuestan por incorporarla a sus dinámicas de trabajo. Y es que, el modelo Talentum LAB de Telefónica constituye una combinación perfecta de éxito para todas los partícipes del proceso. La suma de nuevos enfoques y puntos de vista que aportan los jóvenes profesionales, más la experiencia y visión estratégica de expertos y compañías dueñas del reto, dan como resultado un beneficio mutuo que se traduce en ratios de eficiencia que van más allá de la resolución del reto conseguido.
Los LABs son casos de éxito que no solo encajan teóricamente con un modelo de transformación e innovación, sino que también están probados sus resultado prácticos concretos. Un triunfo cuantitativo donde “hay algo más que la fórmula del resultado”, y donde los retos resueltos eficientemente no son la única métrica de éxito. Aprendizaje, nuevas formas de trabajo, entusiasmo, intercambio de ideas, sinergias, motivación, adaptación a ámbitos laborales reales… Son muchas las ventajas que se desprenden de esta fórmula de “innovación abierta”. Un concepto que, en palabras de Rosalía O’Donnell, responsable de Talentum en Telefónica y experta en transformación digital, “acaba conquistando a todos los actores” que participan de él. Sin duda, desde el éxito de esta fórmula, se contagian nuevas formas y dinámicas de futuro, como trabajar en base a proyectos, ser más ágiles, flexibles, creativos, etc., que marcarán el ritmo adaptativo de las empresas al ámbito digital durante los próximos años.
Un motor de cambio
Estamos hablando de un método disruptivo e innovador de evolución de los procesos empresariales en el ámbito digital, que permite a los jóvenes maximizar su potencial al tratarse de un método que responde a las inquietudes y valores de los jóvenes profesionales, a la vez que crecen y lideran su propia transformación desde la búsqueda y consecución de los diferentes retos a los que se enfrentan.
Como parte de la plataforma Talentum de Telefónica, los LABs surgen en el año 2012, contando ya con el impulso y la confianza de más de 100 partners, muchos de los cuales han apostado por los LABs para resolver diferentes retos en tecnologías de vanguardia como VR/AR, IoT, Machine Learning, Inteligencia Artificial o Business Intelligence, entre otros. También son numerosas las áreas de Telefónica que han incorporado a sus equipos el modelo LABs para la resolución de retos tanto técnicos como enfocados a comunicación y marketing.
En definitiva, parafraseando a Cristina Garmendia, presidenta de la Fundación COTEC para la innovación, innovar es “todo cambio (no solo tecnológico) basado en el conocimiento (no solo científico) que aporte valor (no solo económico). Y todos podemos ser innovadores”.
