Por qué adquirir unos auriculares con cancelación de ruido

La cancelación de ruido es una característica fundamental para lugares de trabajo ruidosos o para personas muy viajeras.

Dentro de la historia del audio portátil, la cancelación de ruido ha marcado un antes y un después. Con unas tendencias de escucha en el espacio de las calles que no dejaban de incrementarse a causa de una democratización que ya supera exponencialmente al Walkman, las principales compañías de audio se dieron cuenta que su experiencia de escucha premium se estaba viendo fuertemente empañada por los molestos ruidos que se perciben cuando andamos rodeados de vehículos, personas, etc.

Eso llevó a diseñar sistemas que no obligasen a los usurios a subir el volumen de la música a niveles peligrosos para la salud auditiva. El sistema más económico es la cancelación de ruido pasiva, que no supone más que eliminar los ruidos exteriores mediante aislamiento acústico físico, es decir, de la misma manera que se insonorizan habitaciones enteras. El modo de hacerlo depende, pues, del material empleado para aislar. Al no ser un sistema activo, que ahora veremos, reduce el ruido exterior hasta cierto punto, pero tampoco tiene una eficacia muy alta.

La cancelación de ruido activa, al contrario, se basa en la teoría de la fase acústica, y elimina el sonido que procede del exterior gracias a un procesador que trabaja con algoritmos y micrófonos. ¿Cómo se hace? La unión de todos los elementos es capaz de captar, analizar y neutralizar el ruido mediante la creación de una onda que no es más que un sonido inverso al que se recoge.

A ciertas frecuencias el sonido no se elimina bien, y normalmente existe un límite de volumen máximo de unos 30 decibelios. A partir de ahí, como es normal, no existe la magia y escucharemos todo lo procedente del exterior. La pega de estos auriculares es que su aislamiento es tan bueno que en la calle podría llegar a ser peligroso, sobre todo porque se pierde atención sobre lo que te rodea, tanto de lo que no quieres escuchar como de lo que sí deberías, como avisos de personas o claxons de coches.

Así, es recomendable usarlos, pero siempre con precaución. La cancelación de ruido está ganando muchos adeptos, particularmente entre la gente que viaja mucho, pues en lugares como en aeropuertos o en la propia cabina del avión se torna imposible escuchar la música con la calidad deseada. Incluso cuando sólo se trata de descansar, la cancelación de ruido ayuda puede ser tu mejor aliada.

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