Los Mario Tennis pertenecen a una de esas franquicias míticas de Nintendo que llevan vivas desde la Nintendo 64. Mario Tennis Aces salva el catálogo de Switch para 2018.
Tras el brillante 2017 de Nintendo Switch, la compañía japonesa no puede decir lo mismo del presente curso. El temor de los seguidores de Mario y compañía es que ocurra lo mismo que pasó con Wii U, es decir, que lleguen muchos juegos de calidad al mercado en sus primeros meses, pero luego se transforme en una plataforma desértica. Sin alcanzar ni mucho menos el nivel de Zelda: Breath of the Wild o de Mario Odyssey, ha llegado al mercado otro título esperadísimo que sirve para devolver esperanzas a sus usuarios: Mario Tennis Aces.
Se trata de otra saga mítica dentro de la familia de consolas de Nintendo, que nació con Mario Tennis en Nintendo 64; progresó con Mario Power Tennis en GameCube, y volvió a fascinar, aunque con menos ambición en Mario Tennis: Ultra Smash en Wii U. Estamos ante la cuarta entrega, pues la consola de sobremesa más vendida de Nintendo, la Wii, se quedó huérfana de juego de tenis, aunque sí triunfó en ella como modalidad de Wii Sports.
En Mario Tennis Aces se ganan contenidos con un modo Aventura, que contiene una cantidad enorme de minijuegos y niveles contra jefes finales. Respecto a ediciones anteriores, la jugabilidad ha mejorado gracias a nuevos movimientos, como el golpe maestro o los golpes especiales, que de tanta potencia que transmiten recuerdan a la Onda Vital de Son Goku. El juego parece muy recargado, pero la complejidad extra respecto a anteriores ediciones juega a favor del usuario.
A diferencia de otras ediciones, en Mario Tennis Ace el hecho de elegir un personaje u otro modifica totalmente la jugabilidad, dependiendo del grupo en que se encuentren presentes: fuerza, velocidad, efecto, etc. Así, es clave aprender a manejar cada uno de ellos para ganar el partido según el rival que tengamos delante.
La experiencia online, que se pudo probar antes de la salida del videojuego, también es reseñable. En local se podrá jugar un partido con hasta cuatro participantes en una misma consola, y cuatro repartidos, en dos y dos, en dos Switch distintas, que es una de las apuestas de Nintendo como consola portátil.