En Vietnam, la empresa VinFast se ha lanzado como la primera del país en fabricar coches y tiene a los eléctricos en el punto de mira.
La industria de la automoción no es uno de los fuertes de Vietnam. Hay algunas fábricas, pero todas producen automóviles de marcas extranjeras. Lo harán al menos hasta ahora, porque la empresa VinFast se ha propuesto ser la primera en lanzar coches con una marca doméstica al mercado.
Su intención es lanzar este año su primer modelo. Será de combustión interna y adaptado a las necesidades del mercado vietnamita. Pero la compañía tiene la intención de desarrollar coches eléctricos pronto. No solo esto. También ofrecerá scooters eléctricas, un tipo de vehículo muy popular en el país, y autobuses eléctricos.
VinFast pertenece al conglomerado Vingroup, que mantiene operaciones en una variedad de sectores, como el inmobiliario o el sanitario. La automoción es nueva para ellos, pero el proyecto se ha planteado de forma expeditiva. Dentro del grupo, poco después de anunciarse los planes de VinFast se ha presentado VinBus, que operará autobuses eléctricos.
No serán pocos. VinBus operará 3.000 autobuses eléctricos en Hanoi, Ho Chi Minh City y otras tres ciudades en 2020. El encargado de fabricar las unidades será VinFast. La compañía prevé ser capaz de fabricar un alto volumen de coches. Para dentro de cinco años, espera poder lanzar al mercado 250.000 automóviles anualmente (el 92% de todos los coches que se vendieron en Vietnam en 2018).
El inicio de una industria local
El número de autobuses que la compañía pondrá en circulación es importante. Se trata de un espaldarazo a una futura industria de la automoción eléctrica en el país. Habrá que ir paso a paso, pues no existe industria local de fabricación de coches, en general. Pero esto también puede jugar en favor de VinFast, pues no necesita mantener un negocio tradicional.
Las inversiones de la compañía estarán orientadas a crear coches de todo tipo. Aunque a buen seguro controlará de manera previsora su gasto en el motor de combustión.
Hasta ahora la automoción es un sector dominado por las grandes empresas estadounidenses, europeas y japonesas, pero el coche eléctrico puede cambiar las tornas. El mejor ejemplo de transición es China. Allí no solo crecen las ventas de modelos eléctricos, también lo han hecho las empresas que los fabrican.
A partir de las reformas del Doi Moi, en 1986, Vietnam abandonó la economía de orden socialista para pasar a un modelo más próximo al de China. Dentro del país, conglomerados como Vingroup están posicionados para jugar un papel importante en su futuro económico.
Con una población de 95 millones de habitantes que crece a buen ritmo, VinFast tiene un mercado interno voluminoso para vender vehículos.
Imágenes: Ramon Boersbroek, VinFast
