La ciencia es divertida, pero sobre todo si se hace acompañado. Te traemos tres experimentos sencillos y seguros para hacer en casa y combatir el aburrimiento.
¿Hay días que no sabes qué hacer en casa? ¿Aburrimiento? Es genial hacer actividades curiosas y que despierten tu lado más aventurero, da igual la edad que tengas, siempre es entretenido hacer nuevas cosas. Si la cuarentena por el COVID-19 se te está haciendo demasiado larga y aburrida, puedes empezar con estos tres experimentos sencillo y seguros para hacer en casa.
¡Muy importante! No son experimentos peligrosos, ante todo queremos seguridad, pero sí que tendrás que estar atento y buscar un lugar más o menos apartado de tu casa. Evita que haya obstáculos entre medias u objetos delicados a tu alrededor, no queremos que, por un experimento y su reacción, termines poniendo la casa patas arriba. ¿Preparado? Coge papel y lápiz para ir apuntando estos experimentos sencillos y seguros.
1. Hielo mágico
Seguro que lo has visto en Instagram o Twitter, esa agua que se convierte en hielo automáticamente. Es muy fácil de hacer. Coge una botella de agua, y llénala hasta arriba. El único problema de este paso es que te va a ser más fácil si lo haces con agua filtrada, lo más pura posible que puedas. Pero no nos vamos a poner exquisitos, si no tienes alguna jarra que filtre, te sirve con la del grifo.
¿Cuál es el siguiente paso? Deberás meterla en el congelador a una temperatura que debe rondar los – 15ºC (15 bajo cero). Ahora, muy importante, tienes que vigilar que se enfríe, pero no se congele. Justo queremos ese punto. Ahora, coloca cubitos de hielo en un bol y vierte tu botella despacio encima de ellos y…. ¡Magia! Se formará una pequeña torre de hielo de forma instantánea.
2. Burbujas súperresistentes y gigantes
¡Vas a llenar tu salón de burbujas de jabón! Si eres de esos a los que nunca se le hadado muy bien ese aparatito de jabón, este es tu experimento. La fórmula para crear estas burbujas resistentes es muy sencilla, coloca dos partes de agua por una de detergente, y una de glicerina, remuévelo todo muy bien y ya solo tienes que soplar.
Este efecto es gracias a que hemos endurecido la fina película de agua que crea la burbuja con la glicerina. La acción de la capa de detergente interna, que actúa como “tenso activo” logrando que la tensión superficial de las moléculas de agua se estabilice. Así, hacemos que la diversión dure más y que dejes con la boca abierta a tus amigos o familia.
3. El vaso sediento
Este quizá es uno de los experimentos más sencillos y seguros para hacer en casa más habituales. No sé si lo has hecho, pero es genial para entender cómo funciona nuestra atmósfera. Aunque creas que es magia, no lo es.
Coloca en un bol un poco de agua, haz flotar en medio de ella una pequeña vela encendida. Encima coloca un vaso boca abajo, de tal modo que la vela quede dentro de él. A medida que la vela consuma el oxígeno que está dentro del vaso, se producirá el efecto físico ‘vacío’ , el nivel del agua dentro del vaso subirá para compensar la diferencia de volúmenes y la vela se apagará.
Este experimento es fantástico para hacerlo con los más pequeños. Te vas a divertir mucho con ellos, sobre todo si les dices que el vaso se ha bebido el agua porque tenía mucha sed. A lo mejor cuela…