La mayoría de las películas utilizan cromas durante los rodajes. Sirven para que los equipos de postproducción ambienten la trama en el lugar que quieran. Sin embargo, han descubierto otra técnica que realiza la misma función en menos tiempo y que, además, presenta otros cuantos beneficios más. ¿Llegará a sustituirlos?
El cine no sería lo mismo sin los efectos especiales. Hemos conocido hace poco cómo se ven las películas con ellos y sin ellos, y la diferencia es bastante considerable. Basta ver algunas imágenes para hacernos una idea.
En gran medida, debemos achacar estos resultados asombrosos a los cromas, las telas de color, normalmente verde o azul, situadas al fondo de los estudios de grabación. Pero estas herramientas podrían estar a punto de “jubilarse”. Pese a que sus frutos son estupendos y sus posibilidades, casi infinitas, la tecnología ha encontrado una técnica aún mejor.
Ventajas frente a los cromas
Su nombre es Stagecraft, y se trata, básicamente, de unas enormes pantallas LED que sustituyen a los cromas en el final del escenario. Esta coincidencia en la ubicación no es fortuita: su función es ambientar la trama, por detrás de los actores y de la acción. Pero mientras los cromas son elementos estáticos, sobre los que posteriormente el equipo de postproducción tiene que trabajar, la nueva técnica es dinámica y reproduce imágenes en directo y a tiempo real; lo que supone diversas ventajas.
Entre ellas, una de las más significativas es que los actores pueden meterse mejor en el papel que interpretan. Al estar rodeados del escenario en cuestión mientras actúan, es más fácil que la escena les envuelva y les sumerja en la ficción.
Otra ventaja es la visualización del resultado. Con Stagecraft es instantánea: durante la grabación ya se conoce el resultado de las imágenes finales y cómo se combinan con la trama. En cambio, con los cromas hay que esperar al trabajo de postproducción para hacerlo. Sin duda, una diferencia que valoran y agradecerán los profesionales que trabajan en ello.
Los efectos especiales de The Mandalorian están hechos con esta técnica
¿Por qué se habla ahora de estas pantallas LED que sustituyen a los cromas? No es una tecnología creada este año ni el pasado. Sin embargo, recientemente ha aumentado su popularidad por la conocida serie de televisión The Mandalorian, que la ha utilizado para crear sus efectos especiales.
Esta serie, ambientada en el universo Star Wars y estrenada en noviembre de 2019 en Disney+, es el mejor ejemplo de sus resultados. A continuación, puedes verlo con detalle.
Han utilizado tres pantallas LED gigantes, una de ellas para el techo. Sus medidas son de 6 metros de alto y 23 de ancho. Pero, además de su tamaño, están ligeramente curvadas, por lo que pueden rodear bien a los actores. Dotadas de una alta resolución 4K, pueden proyectar prolongaciones de objetos que están físicamente en el estudio y que el espectador no note la diferencia.
En su caso concreto, la creación de las imágenes ha sido posible gracias al motor gráfico Unreal Engine 4, desarrollado por el estudio Epic Games, autor de conocidos videojuegos, como el Fornite, entre otros muchos. Con él, pueden ajustar la imagen a las necesidades.
Podemos conocer un poco más acerca de la herramienta en el siguiente vídeo, donde los propios profesionales que trabajan con ella explican su funcionamiento.
Otras películas que la han utilizado
Antes que la primera temporada de The Mandalorian, las películas Ad Astra y First Man también la emplearon, aunque a menor escala. Curiosamente, las dos se ambientan en el espacio. La próxima cinta que ha anunciado su uso es The Batman, protagonizada por Robert Pattinson y que será estrenada en junio de 2021.
Su precedente: la retroproyección
¿Cuál es su origen? Tenemos que remontarnos a los años 30. Entonces, y durante varias décadas, algunas películas utilizaron una técnica llamada “retroproyección”, que consistía en colocar a los actores delante de una pantalla, que reproducía las imágenes.
Un ejemplo conocido de su uso es la película Con la muerte en los talones, protagonizada por Cary Grant. En una escena icónica de la cinta, el actor se tira al suelo para no ser arrollado por un avión, que en realidad estaba siendo reproducido por una pantalla.
Los avances de la tecnología han permitido que esta técnica evolucione hasta las actuales pantallas LED gigantes, que son capaces de reproducir la imagen con una nitidez asombrosa y de adaptar la misma a las necesidades del rodaje.
Ahora que han saltado a la fama y conocemos sus resultados, seguro que más películas y series comienzan a aprovecharla.