Las nuevas tecnologías han llegado a convertirse en una herramienta muy valiosa en muchas entidades. Incluso puede servir de ayuda para la planificación urbana sostenible, como sucede en este caso que utilizan las denominadas digital twins para mejorar el entorno de la población.
El concepto digital twins o gemelos digitales lleva existiendo desde el año 2002 y siempre ha ido relacionado al Internet de las cosas (IoT).
Pues bien, las tecnologías digital twins han dado un paso al frente. Esta vez, un grupo de investigación del Centro de Computación de Alto Rendimiento de la Universidad de Stuttgart (HLRS), junto al Instituto Fraunhofer, han creado un gemelo digital con el objetivo de mejorar la urbanización sostenible en la ciudad de Herrenberg (Alemania), que cuenta con más de 30.000 habitantes.
Mucho más que un lugar donde vivir
Una ciudad es mucho más que un lugar, al menos eso piensa Fabian Dembski, uno de los encargados de este proyecto.
Dembski sugiere que las ciudades funcionan como un organismo vivo que va evolucionando con el paso del tiempo. Por ese motivo, la planificación de la ciudad puede mejorar o no la salud de los habitantes.
Es cierto que la tecnología ha servido de gran ayuda a las grandes ciudades para hacerlas eficientes, equitativas e inclusivas.
Para recrear esta ciudad, los investigadores utilizaron la supercomputación para desarrollar modelos de entornos urbanos mediante la adaptación de los gemelos digitales en ciudades que simularían procesos de planificación.
El enfoque de este proyecto consiste en que en la vida de una ciudad se producen infinidad de interacciones. Para comprenderlas hay que tener en cuenta factores como la calidad del aire, el estado del tráfico o la prevalencia de peatones.
La importancia de las emociones
Se produce un esquema en 2D, luego se incluyen datos geográficos y datos de tráfico para conseguir una recreación realista.
Todo esto sirvió para crear una aplicación que invitaba a los residentes de la ciudad alemana a enviar sus respuestas emocionales, es decir, enviaban sus sensaciones hacia ciertas localizaciones.
Una vez obtenidas las respuestas se procede a hacer una visualización en 3D de la ciudad y se incluyen los datos proporcionados, creando así un modelo de realidad virtual inmersivo.
Según el equipo de investigación, se plantea la posibilidad de incorporar aplicaciones de Inteligencia Artificial para representar las emociones de sus ciudadanos.
